Estilo de vida > Pandemia
Tomá sol, comé tranquilo y hacé deporte: cómo sobrellevar el teletrabajo, según el Sinae
En tiempos de pandemia, el teletrabajo se ha convertido en el día a día de buena parte de la fuerza de trabajo del Uruguay. Esta modalidad que puede resultar atractiva, desde el punto de vista de la reducción de tiempo y gasto en el transporte, el aumento de las horas de descanso y de la comodidad extra que a algunos les supone el utilizar ropa de pijama, al menos en la mitad inferior del cuerpo, también ha disparado los niveles de estrés y disputas en el hogar familiar, entre otros puntos negativos a destacar.
A este respecto, el Grupo Asesor Científico Honorario (GACH), elaboró un documento en el que se reportó el aumento de los conflictos intrafamiliares, como consecuencia de la necesidad de uso de recursos informáticos e internet. Todo ello se vincula con algunos "riesgos ergonómicos" derivados de los inapropiados espacios de trabajo (sillas incómodas y mala iluminación son los factores más comunes) que conducen a los trabajadores a sufrir fatiga visual, tendinitis de miembros y dolor cervical, dorsal y lumbar.
El estrés reconocido por la población empleada puso de manifiesto problemas adicionales como alteraciones en los hábitos de sueño, ansiedad y angustia, además de posibles trastornos cardiovasculares y digestivos.
Como respuesta a esto, el SINAE (Sistema Nacional de Emergencia) realizó una compilación de las recomendaciones que publicó la Agencia de Gobierno Electrónico y Sociedad de la Información y del Conocimiento (Agesic) para mejorar el entorno laboral en las casas.
Definir un espacio de trabajo
Es importante contar con un lugar bien iluminado para hacer un uso eficiente de la energía eléctrica y para reducir gastos en la factura de la luz. Por la misma razón, se recomienda evitar mantener conectados los dispositivos electrónicos durante todo el día.
Del mismo modo, los expertos de la Agesic insistieron en la necesidad de trabajar desde una silla que permitan mantener la espalda recta.
Fijarse una rutina
La planificación de los asuntos pendientes y los prioritarios es crucial en aras de alcanzar la eficiencia.
También resulta necesario tener unos horarios bien definidos de manera que se mantenga la misma dinámica que se manejaba en el lugar de trabajo. De ahí que se deban mantener horarios de desayuno y almuerzo fijos en los que poder dejar la actividad laboral de lado y poder comer con tranquilidad.
Hacer frente al estrés
Si se producen choques o situaciones incómodas durante la jornada, es aconsejable expresar el malestar por la vía oral (videollamadas o llamadas), evitando así la comunicación escrita que, a menudo, puede jugar malas pasadas.
Los expertos informaron de la importancia de hacer pausas de cinco minutos en las que poder mover el cuerpo y tomar el aire cada hora. E incluso recomendaron practicar deporte y tomar el sol, al menos diez minutos al día, para estimular la liberación de endorfinas (la vitamina D ayuda a generar esta hormona que mejora el estado de ánimo).
Por último, la Agencia aconsejó no perder el contacto social con los compañeros, amigos y familia.
