El 39% aprueba el desempeño de Lacalle Pou, el 38% la desaprueba y 22% tiene una visión intermedia

Así lo constata la última encuesta de la consultora Equipos, la que encuestó cara a cara, entre el 2 y el 20 de diciembre, a 704 uruguayos representativos de la población adulta del país. Si se compara con la anterior medición, de hace menos de un mes, la aprobación del desempeño del presidente cayó cinco puntos porcentuales (de 44% a 39%). También descendió la desaprobación, aunque en menor medida (de 40% a 38%). 

Según el informe de Equipos, “mirados los datos en perspectiva, desde octubre (coincidentemente con el inicio del ‘caso Astesiano’) el presidente perdió 10 puntos de aprobación, aumentó seis la desaprobación, y como consecuencia su saldo neto pasó de +17 al comenzar octubre a +1 al terminar el año”.

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Durante el comienzo de la emergencia sanitaria, ni bien había asumido su mandato, Lacalle Pou gozaba de una imagen muy favorable (el 65% aprobaba su gestión) y su desempeño era equiparable, a juzgar por los encuestados, al primer mandato de Tabaré Vázquez. La alta aprobación se mantuvo hasta la caída más pronunciada del último trimestre.

La opinión sigue estando muy marcada por la autopercepción ideológica de los encuestados. Entre quienes se definen a sí mismos como de “izquierda” o “centro izquierda”, la desaprobación a Lacalle Pou es muy mayoritaria (74%). En cambio, entre quienes se definen como de “derecha” o “centro derecha” existe una aprobación casi tan amplia (72%). En el “centro” del electorado, el presidente recibe evaluaciones divididas de saldo positivo (37% de aprobación y 28% de desaprobación).

Es en el centro del electorado que, a juzgar por distintos analistas de opinión pública, se daría parte de la puja política en la próxima campaña electoral, ante la existencia de dos bloques partidarios con fuerzas casi simétricas.