La organización de una Copa del Mundo signfica una importante palanca económica para el crecimiento y el futuro de España.
La FIFA anunció que el Mundial 2030 será el primero en desarrollarse en tres continentes y en seis paises, siendo los partidos inaugurales en Argentina, Uruguay y Paraguay, y después se trasladará a Europa, más precisamente a España, Portugal y Marruecos.
El Gobierno español calcula que la organización reportará solo a España más de 10.000 millones de euros de ingresos, según previsiones que hizo públicas en el Real Decreto 1034/2022, de 20 de diciembre de 2022.
A través de estudios elaborados, se llegó a la conclusión que el torneo generará un volumen de negocio de 5.120 millones de euros y 82.513 empleos a tiempo completo.
A esta cifra se le deben sumar los ingresos que dejarán los visitantes específicos del Mundial, que se estima que superen los 5.500 millones de euros.
Según el Ejecutivo, se estima que "por cada euro de gasto en inversión y en organización para el desarrollo de la Copa del Mundo de 2030 se generarán, solo para España, 4,28 euros del PIB y 1,32 euros de ingresos fiscales".
El Gobierno programa 1.430 millones de euros para la organización del evento futbolístico más importante del mundo y el importe total de esta se dividiría en 750 millones de euros destinados para infraestructura, y otros 680 millones de euros que se utilizarán para los gastos de organización.
No obstante, según otro estudio realizado por los investigadores Martin Müller, David Gogishvili y Sven Daniel Wolfe, de la Universidad de Lausanne, señala que, tanto el Mundial como los Juegos Olímpicos, tienen un "déficit estructural".
Esta investigación señala que estos grandes eventos generan más costos que ingresos y el gran ejemplo que proponen es de la última Copa del Mundo, celebrada en Qatar, que fue de cerca de 8.000 millones, el más abultado de la historia de esta competición.
“Los Juegos Olímpicos y el Mundial de fútbol padecen un déficit estructural y no podrían existir sin subvenciones externas”, manifiesta el estudio, que admite, eso sí, que sus datos deben ser tratados como aproximaciones y no como información precisa.
El caso de Qatar es diferente al de otros mundiales porque ese país realizo la infraestructura prácticamente desde cero. En cambio, España ya posee un aeropuerto de primera categoría como Barajas, y transporte público y carreteras de primer nivel.
Otro aspecto a tener en cuenta sobre los gastos es la remodelación de los estadios para este evento. España presentó 15 candidaturas de recintos para albergar el Mundial, aunque resta que la FIFA los inspeccione de acuerdo a sus exigencias.
El ente regulador del fútbol pretende que las canchas tengan como mínimo un aforo de 40.000 espectadores para los primeros partidos y las primeras rondas de eliminación. En semifinales, deberá tener espacio para 60.000 personas, mientras que para la final el estadio tendrá que contar con una capacidad para 80.000 espectadores.
Aunque no esta definido, las sedes que tendrían su lugar asegurado son Barcelona, Madrid (posiblemente donde se dispute la final), Bilbao y Sevilla.
Los 15 estadios que postuló España son: Balaídos, El Molinón, Riazor, San Mamés, Anoeta, La Romareda, Camp Nou, RCDE Stadium, Santiago Bernabéu, Cívitas Metropolitano, Nuevo Mestalla, Nueva Condomina, La Cartuja, La Rosaleda y Gran Canaria.
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