El sello de Nahitan Nández: tirarse al piso y trancar con la cabeza

Por la celeste, cueste lo que cueste. Ese parece ser el lema de Nández cuando se pone la de Uruguay. Aunque lo suyo verdaderamente trasciende las camisetas. Es una forma de ver y sentir el fútbol. No regalarle nada al rival y jugarse el físico por la causa. 

Contra Ecuador, hombre de Cagliari fue la gran figura de Uruguay dando la asistencia de gol a Gastón Pereiro sobre el final del encuentro. 

Pero en el primer tiempo protagonizó una acción que ya da vuelta al mundo. En un intento de desborde del volante Moisés Caicedo. Nández lo cuerpeó, ambos quedaron desestabilizados y ahí se tiró al piso para cabecear y ganar la pelota, con una recuperación heroica. 

Ya lo había hecho en 2018 en La Bombonera jugando por Boca Juniors, por Copa Libertadores contra Palmeiras. 

En el Mundial de Rusia, en el triunfo 3-0 ante Rusia en Samara, Nández disputó con la cabeza una pelota contra la banda, contra Anton Miranchuk. 

En 2017, contra Racing también marcó a Marcelo Saracho con la cabeza, pero le terminó cometiendo falta. 

Tampoco fue la primera vez que un jugador uruguayo lo hace. Álvaro Pereira y Nicolás Lodeiro, y José María Giménez en Atlético de Madrid, por citar ejemplos cercanos en el tiempo.