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Entre el baile y colores, miles marcharon por la diversidad
La ansiedad no la deja dormir. Pasa la noche pensando en el vestuario y maquillaje que se va a poner. Está nerviosa y quiere lucir "perfecta", entonces decide levantarse. Enseguida empieza a prepararse. Demora dos horas pintándose. Se pone pestañas postizas y un labial rojo. Luego viste un vestido violeta, unos tacos plateados y se va a la plaza Independencia para marchar por su identidad.
Para Romina, la Marcha por la Diversidad es una reivindicación de sus derechos y de los logros por los que hace al menos 10 años que lucha. "En este tiempo las cosas cambiaron, pero no es suficiente", cuenta antes de asegurar que "aún falta un largo camino por recorrer". Rodeada por personas que paran para sacarse fotos, la joven trans celebra su identidad. No puede dejar de sonreír.
Al igual que Romina, miles de uruguayos se acercaron a la plaza Independencia para marchar bajo la consigna "Lucha y resistencia". Mientras esperan que empiece la actividad, cientos se detienen en la feria que se instaló en el lugar. Aquí se venden desde vestidos hasta accesorios y pegotines.
En la carpa hay diferentes productos, pero todos cumplen una condición: identifican a la comunidad LGBTI. Con los colores de la bandera y las ideas que defienden, los comerciantes también celebran. Todos festejan en el evento al que consideran una fiesta.
Mientras los adultos ven los productos que se venden, los niños corren a pintarse la cara y los jóvenes se reúnen y bailan. De repente, la música se siente más fuerte y todos corren hacia 18 de Julio. La marcha estaba por comenzar.
Antes de iniciar, llegan cuatro camiones con las banderas de la diversidad y encienden el lugar. Empiezan los gritos, la emoción y los saltos, aunque la situación está controlada. Frente a los vehículos, algunos se toman de la mano y empiezan a caminar. Las caras pintadas, las banderas gigantes y las pelucas coloridas sobresalen entre la multitud.
Al ritmo de la música, la gente empieza a avanzar. "Por una noche nos sentimos libres y la sociedad deja los prejuicios atrás", cuenta Romina antes de perderse entre los uruguayos que se convierten en bailarines.
Algunos se detienen a tomar fotos y otros solo observan mientras caminan, pero la mayoría recorre la avenida cantando las canciones con las que la comunidad se siente identificada.
Se escuchan canciones como I kissed a girl ("Besé a una chica", en español) de Katy Parry, y A quién le importa, de Thalía, que enloquece a los que están encima de los camiones. Muchos integrantes de los colectivos que apoyan la marcha están en estos vehículos que animan el recorrido.
Después se escuchan los fuegos artificiales que se lanzan desde la Intendencia de Montevideo en apoyo a la movilización. Esta noche, la comunidad LGBTI es la protagonista de la ciudad.
"Diversidad es lucha y resistencia"
Con la consigna "Lucha y resistencia", varias organizaciones sociales reunidas llaman a "hacerle frente al discurso conservador que amenaza con el retroceso" de las conquistas. " La Marcha por la Diversidad implica un elogio a la libertad, a las diferencias, a la multiplicidad, una visibilización festiva de una sociedad variada, distinta, siempre en clave de alegría y de respeto", dice la convocatoria en su cuenta de Facebook.
