Un pasado doloroso, una historia de soledad y su convicción de ser “un elegido”: el libro que muestra el lado B de Javier Milei

Siempre el lado B de los candidatos, de los personajes públicos, despierta interés. En el caso de Milei y con la campaña electoral desatada la expectativa es superior.

Un pasado doloroso, una historia de soledad, su entorno diezmado y su convicción de ser “un elegido” le dan forma al perfil que construye el autor sobre el candidato más disruptivo de la política argentina.

También surgen del libro preguntas a futuro. ¿Un hombre sin habilidad para conectar en lo social puede ser presidente? González cree que no. “Milei es como un auto hecho para que lo vean, no para funcionar”, dice. En ese marco, la mirada de su entorno sobre una posible presidencia del candidato libertario tampoco es alentador. “Duramos dos semanas”, asegura.

El hombre que se presentar como el candidato antisistema “tiene la desconfianza sobre el género humano tatuada en las venas” asegura el autor.

-¿Cuándo arrancaste con la investigación pensaste en encontrarte con esa infancia y esas historias?

Algo sabía. Lo que sorprendió es la profundidad de esas cuestiones. Yo fui a buscar la historia de nuevo líder de la derecha y me encontré con un hombre solo. Eso es lo que más me llamó la atención, más allá de los de su relación con los perros y lo esotérico.

Milei es un hombre que tuvo un solo amigo en toda su vida, que tuvo una sola pareja a los cuarenta y pico. Fue un niño golpeado. Esa relación con el padre también está muy marcada. Un padre que inflaba el pecho contando que le pegaba y que le regaló un auto porque decía que era un inútil que nunca se lo iba poder comprar.

¿También ves un tipo débil en contraposición con lo que muestra en sus apariciones públicas?

No lo sé. Yo Imagino que se debe sentir fuerte, sobre todo por lo mesiánico. Está tan convencido en su cosa mesiánica, de que es el elegido por Dios, que se debe sentir fuerte.

Pasó de ser un hombre solo, un chico que sufrió violencia, a ser vitoreado por miles de personas cuando sale al escenario.

También es cierto que el tipo, dentro de su entorno, termina cediendo ante la hermana. La que se impone es la voz de Karina. El termina guardando silencio. Es un subibaja emocional.

-¿Después de haber investigado y de meterte en la intimidad del personaje, pensas que Milei está preparado para ser presidente?

-Creería que no. De hecho, en La Libertad Avanza (el partido político que lidera Javier Milei) dicen que si gana Milei duran dos semanas: en la primera hacen todo lo que Javier dice que hay que hacer y en la segunda se van. Milei es como un auto que está hecho solo para que lo vean, no está hecho para funcionar.

Creo que Milei no es consciente de esto. No se da cuenta de que lo que propone es irrealizable. En parte eso tiene que ver con que terminó expulsando del espacio que conduce a todos los que sabían de política. Es un hombre que no quiere escuchar.  

¿Los echó porque no quiere escuchar o porque no quiere que lo eclipsen?

Milei tiene la desconfianza sobre el género humano tatuada en las venas. Es alguien que nunca desarrolló la habilidad para conectar en lo social, que no puede entablar relaciones. Alguien con un solo amigo, con una sola pareja. En ese marco, también las expulsiones tienen que ver con no permitir que nadie lo eclipse.

¿La relación que tiene con los perros te sorprendió?

Es algo que Milei no oculta. Un hecho que me llamó la atención haciendo la investigación, es que son bastantes personas que lo conocen. Uno diría a priori: “nadie conoce estas conexiones místicas, pero son varias personas que conocen sobre esto”.

De hecho, la médium que tiene Milei, Celia Melamed, que ahora ya es famosa, se la recomendó a mucha gente mediática conocida. Llegando a pagar la primera sesión de espiritismo, que ellos los llaman “comunicación entre especies”.

Es algo que no se puede desmentir. Es verdad que en los reportajes no contesta mucho sobre el tema. Pero la última semana estuvo en un programa de televisión y cuando le preguntaron por eso eligió responder que adentro de su casa puede hacer lo que quiera y que en cualquier caso Conan (el perro con el que se comunica por intermedio de la médium) sería el mejor asesor económico del mundo. Pero no lo desmintió. Es algo que todo el círculo de Milei sabe.

¿Cuánto te llevó la investigación para poder hacer el libro?

Con Javier Milei tengo relación desde el año 2018. Pero el libro se empezó a escribir en 2021, tardé dos años. A la editorial lo llevé en setiembre del 2021, pero en realidad la investigación empezó antes.  Yo cubría temporada para la revista Noticias. En 2020 seguía a Carlos Maslatón. Ahí vi el fenómeno y empecé a seguir a toda esa gente.