La emisión del bono indezado al cambio climático posicionó a Uruguay como un país  "innovador, diferente y disruptivo",  según el consultor Agustín Inthamoussu

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La COP27 reafirmó las buenas perspectivas de Uruguay en el negocio de los créditos de carbono

El país puede aprovechar su buen desempeño a la hora de generar créditos de carbono a cambio de financiamiento para proyectos sostenibles
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04 de diciembre de 2022 a las 05:00

El artículo 6 del acuerdo de París refiere a la venta de créditos de carbono que está previsto que se realice entre países. Este es un tema que afecta directamente a Uruguay por su buen desempeño.
En el reciente evento COP27 se reafirmó que este mecanismo continuará, lo que implica que Uruguay puede generar créditos de carbono como país y vendérselo a otro al que no le haya ido tan bien en su performance. Así lo explicó a Café & Negocios el consultor en cambio climático y desarrollo sostenible, Agustín Inthamoussu, quien estuvo presente en el encuentro.
“Si Uruguay se comprometió a reducir esas emisiones y superó esa reducción, ahí puede generar un crédito de carbono  y exportarlo a aquel país que dijo que iba a hacer tal cosa, pero no lo consiguió”, indicó el experto.
Este mercado le abre a Uruguay la posibilidad de generar recursos adicionales exportando créditos de carbono. De hecho, Uruguay está por firmar por Suiza un acuerdo de este tipo, lo que le permite además generar un vínculo bilateral que puede llevar a nuevos proyectos en conjunto. “Si se hacen, por ejemplo, proyectos de hidrógeno verde y eso genera una reducción de emisiones en Uruguay, luego pueden computárselo porque lo financiaron a cambio de los créditos de carbono”, explicó Inthamoussu.
Estos acuerdos podrían realizarse con varios proyectos lo que dotaría a Uruguay de la capacidad de financiar actividades para mitigación y adaptación al cambio climático.
Inthamoussu, fundador de la consultora ClimIt se refirió a la posición de Uruguay a la hora de negociar financiamiento. “Uruguay negocia junto con un grupo que se llama el G77 más China, son los países de Latinoamérica, África y China, unos 130 países”, sostuvo Inthamoussu y remarcó que todos tienen necesidad de financiamiento y el desafío está en quedar bien posicionados para recibirlo. “Hay que competir con otros países que, quizás, son más desfavorecidos por sus economías o por cómo el cambio climático impacta en ellos”, indicó.

Innovador y disruptivo

 Uruguay llegó a la COP27 presentando un mecanismo nuevo de financiamiento, la emisión del bono soberano indexado al cambio climático. “Eso posiciona a Uruguay en el mundo del cambio climático como innovador, diferente y disruptivo”, remarcó Inthamoussu y destacó que además de la atenta escucha los presentes preguntaron cómo replicar este modelo a sus países.
En referencia a los compromisos asumidos por Uruguay, Inthamoussu destacó que el país ya está por cumplir los compromisos asumidos para el plazo comprendido entre 2020 y 2025. “Ya estamos por llegar al objetivo”, indicó el consultor. Uno de los objetivos es  reducir las emisiones de gases del efecto invernadero por unidad de PBI—el mismo indicador que se utiliza para cumplir con el bono soberano—.
Ese compromiso sostiene que se debe reducir en un 50% las emisiones por unidad de PBI respecto a 1990, hoy Uruguay está en un 47%. “Estamos preparando la segunda contribución nacionalmente determinada y tiene que ser más ambiciosa que la primera. Hay que proyectar qué vamos a proponer de 2025 a 2030, ahí es donde el gobierno tiene que proponer cosas más ambiciosas, pero esas cosas finalmente las tiene que hacer el sector privado”, reafirmó el consultor.
Más allá de que las empresas se involucran en la sostenibilidad por su reputación o su imagen, el cumplimiento de estos objetivos país están estrechamente ligados a su participación. “El sector privado tiene que ser el motor que lleve a que nuestras emisiones bajen”, enfatizó Inthamoussu.

Agro sostenible

Uruguay se comprometió a reducir sus emisiones de metano en un 30%. “Acá el mecano significa ganadería, entonces hay que trabajar con ese sector”. Según Inthamoussu el conocimiento está, pero es necesario mayor financiamiento para llevar a cabo soluciones. “Es el sector privado el que se tendrá que poner a mejorar los índices productivos”. 
Para que eso suceda es necesario hacer inversiones que, según el consultor deberían ser premiadas por el gobierno a través de mecanismos de exoneración tributaria. “Si como productor ganadero te benefician pagando menos impuestos si tus emisiones son por debajo de cierto nivel, entonces, hay motivación”. “Eso debe reconocerse porque lleva a que Uruguay reduzca sus emisiones, cumpla con el acuerdo de París y con el indicador del bono soberano”.

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