Nuevo escándalo real: Meghan Markle y la reina Isabel intercambian acusaciones por un cambio en el certificado de nacimiento de su hijo

Markle responsabilizó del cambio al palacio de Buckingham, es decir, a la familia real británica, de cuyos roles públicos la pareja se retiró en 2020 y decidió radicarse en Estados Unidos y Canadá, además de comenzar a buscar su independencia financiera de la corona. Tanto Markle como Harry y Archie conservan sus títulos a pesar de este retiro.

“El cambio de nombre en los documentos públicos en 2019 fue dictado por el Palacio. Esto no fue solicitado la duquesa de Sussex ni por el duque”, fue la respuesta de Markle, según el portal argentino Infobae. La duquesa consideró, además, que era ofensivo pensar que su deseo era que su nombre desapareciera de los documentos oficiales. 

Sin embargo, desde el palacio negaron haber sido los responsables de estos cambios. El diario británico The Daily Mail establece, según fuentes del palacio, que el cambio vino por parte de los trabajadores al servicio de los duques, y que ni la reina Isabel ni nadie de la familia real tuvo parte en esas alteraciones al documento. La realeza británica reaccionó con sorpresa al cambio, y según los medios británicos, la modificación puede responder a una intención de unificar criterios con respecto a otros documentos, aunque entre las teorías más maliciosas está la de que Markle hizo el cambio para imitar a su suegra, la princesa Diana, que puso sus títulos en los certificados de nacimiento de sus hijos.

Se estima que debido a estas tensiones aún latentes, Markle y Archie permanezcan en Los Ángeles, donde residen actualmente, cuando en junio Harry viaje al Reino Unido, a visitar a su familia por primera vez desde el escándalo provocado por su alejamiento de las tareas reales. Será para el cumpleaños número 100 de su abuelo, Felipe, el esposo de la reina, además de participar en otros eventos, incluyendo la inauguración de una estatua en homenaje a su madre, junto a su hermano, William.