Se anuncian lluvias y los productores están esperanzados

La zona este recibiría la mayor cantidad de lluvia, de 10 a 30 milímetros, informó el meteorólogo, José María Rodríguez, a Valor Agregado de Carve. Eso tiene esperanzados a los productores de esa parte del país, una de las zonas más afectadas por el déficit hídrico.

Lo que se espera no son grandes niveles de agua, sino lluvias continuas, que, semana a semana, recarguen el suelo.

Raquel Russi, directiva de la Rural de San Carlos y productora ganadera de la zona de Cerro Negro informó a El Observador que la semana pasada cayeron 16 milímetros de agua en su campo y que eso, y los pronósticos anunciados para esta semana le dan cierto alivio.

“He escuchado algunos pronósticos que dicen que La Niña se va neutralizando, y con eso pueden darse momentos de lluvia que nos van a paliar la situación. Diferentes meteorólogos anunciaron que posiblemente el otoño sea llovedor y que esta semana volvía a llover en la zona del este, ojalá eso se produzca”, comentó.

El campo de Russi tiene como ladera al Cerro Negro y, según explicó la productora, con el paso de los años ha comprobado que “en tiempos de sequía, el agua viene desde la costa, cruza la ruta 9 y llega por último, en la parte del campo que está contra el cerro”.

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Los promedios serán irregulares

Rodríguez detalló que hay un doble ingreso de humedad, en niveles bajos provenientes del Océano Atlántico y en niveles medios provenientes de zonas más tropicales; esa humedad, en interacción con las altas temperaturas, generará tormentas aisladas al norte del Río Negro, con promedios escasos de precipitación.

Para el martes se anuncia una alta probabilidad de tormentas y chaparrones aislados en todo el país; y para el miércoles otra jornada inestable donde habrá precipitaciones y tormentas.

El meteorólogo explicó que los promedios de lluvia serán irregulares en todo el país. “En algunas zonas habrá 50 milímetros y otras van a tener menos de 10. La mayor cantidad de lluvia se concentrará en el este de país. Hay pronósticos de 10 a 30 milímetros para esa zona y de entre cinco a 15 milímetros en el resto del territorio”, comentó. El tiempo se estabilizará nuevamente el jueves.

Según dijo, la irregularidad en los promedios de las precipitaciones se debe a que las tormentas serán por masa de aire, por calor y humedad.

Los cultivos están “lluvia-dependientes”

Roberto Verdera, gerente general de la Cooperativa Agraria Limitada de Mercedes (Calmer), contó que la última lluvia que se dio en la zona “fue chica y bastante dispareja”, con no más de 12 milímetros.

Por los días más largos, las temperaturas altas y la evapotranspiración más elevada, los cultivos demandan cada vez más agua.

“Se fue sembrando a medida que fue lloviendo y estamos muy lluvia-dependientes, porque no hay reserva de agua en el suelo”, dijo y explicó que si se cumplen los pronósticos, aunque sea en volúmenes pequeños, eso ayudaría. La soja, por ejemplo, necesita recargas de agua todas las semanas, ya que no se sembró con un buen perfil de agua.

A nivel de campo, explicó el gerente de Calmer, las pasturas están bastante secas, pero el mayor problema es que “se están retirando las aguas, quedan algunos arroyos y cañadas pero los tajamares empiezan a no funcionar porque no ha habido recargas de volumen”.

Julio Armand Ugón, presidente de la Federación Rural, comentó que siempre, en esta época, se está a la espera de lluvias, y añadió que en la zona de Minas de Corrales "por ahora los campos están bien", porque ha llovido poco pero seguido cada semana.

Por otra parte, en Tacuarembó los productores de arroz también están a la espera de las lluvias de esta semana, para terminar el ciclo del cultivo con tranquilidad. "Si bien la mayoría de los productores del departamento siembran según la disponibilidad de agua que tengan las represas, en este momento hacen falta precipitaciones que aumenten el volumen de agua de las mismas", comentó el presidente de la Asociación Rural de Tacuarembó, Joaquín Villagrán.

En octubre, muchas represas de ese departamento tenían niveles que se encontraban por debajo de su capacidad de almacenaje.

La falta de agua afecta el entore

El déficit hídrico preocupa también a nivel ganadero, principalmente en este momento en el que se "está jugando el entore".

Villagrán explicó que la falta de precipitaciones viene afectando negativamente el entore, porque "la falta de disponibilidad de forraje, como la falta de forraje verde (sin mucha energía), son un común denominador, así como también la falta de agua para abrevadero".

El dirigente gremial comentó que ahora se ven vacas de cría con menor condición corporal que a inicio de 2020, "y si bien hay animales que se pueden encontrar en buen estado corporal, internamente no se sabe exactamente si están ciclando o no". 

En ese sentido, Villagrán recomendó realizar un destete precoz, un destete temporario, ajustar carga en los campos o utilizar suplementación para las vacas de cría, para que las empresas logren tener un buen porcentaje de preñez.

"En cuanto llueva, no va a llover ni pasto ni condición corporal de los animales y las consecuencias negativas de la falta de precipitaciones generalmente se van a visualizar en los meses próximos", indicó el presidente de la Rural de Tacuarembó.

La Unidad GRAS del Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA) compartió, ese lunes, la estimación de agua disponible en todo el país.