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Se prevé que los argentinos compren un inmueble por día en Uruguay en 2023
En épocas de crisis y de baja rentabilidad en Argentina, el mercado inmobiliario uruguayo cobra relevancia en el otro margen del Río de la Plata. En la actualidad, se calcula que se venderá un inmueble por día en Uruguay a inversores argentinos en 2023.
Tras ubicarse en el segundo puesto durante años, la capital uruguaya pasó a ser la ciudad con los apartamentos más caros de la región, en unidad de metro cuadrado, según el Relevamiento Inmobiliario de América Latina publicado en setiembre de este año.
El informe fue elaborado por el Centro de Investigación en Finanzas (CIF) de la Universidad Torcuato Di Tella y la plataforma especializada en el rubro de real estate Zonaprop. El relevamiento concluyó que el metro cuadrado en Montevideo sale en promedio US$ 3.054. En segundo lugar se ubicó la ciudad Santiago de Chile, Chile (US$ 2.724). Cerraron el top cinco Ciudad de México, México (US$ 2.424); Buenos Aires, Argentina (US$ 2.421) y Río de Janeiro, Brasil (US$ 2.291).
En este escenario, los argentinos se interesan cada vez más por invertir en el mercado uruguayo de bienes raíces.
De hecho, en los últimos 11 años, los argentinos compraron más de 2 mil viviendas, cuyo destino es la renta. El pronóstico para 2023 es aún más alentador: "esperamos vender al menos 400 inmuebles, es decir prácticamente un inmueble por día", dijo Gonzalo Martínez Vargas, CEO de Moebius Consultora Inmobiliaria.
En el sector de real estate uruguayo, los argentinos "son quienes tienen mayor participación en el mercado. Son los principales inversores extranjeros", apuntó Martínez y agregó que "hoy las principales consultas llegan de Buenos Aires, Córdoba, Mar del Plata y Mendoza".
La mayoría de los argentinos que apostaron en los últimos años en el mercado de bienes raíces uruguayo lo hicieron en Montevideo, sobre todo a través de la ley de Viviendas Promovidas (18.795). Esta normativa se aprobó con el objetivo de generar mayor acceso a viviendas por parte de sectores con ingresos medios y también de promover las inversiones en el rubro inmobiliarios por los beneficios fiscales.
"Los inversores, en su mayoría particulares, están comprando apartamentos en zonas de Vivienda Promovida. Prefieren monoambientes y unidades de un dormitorio. Sin duda son los preferidos por la demanda y los que se arriendan más rápido. En la relación costo/renta, es donde se obtienen las ganancias más altas", remarcó el consultor inmobiliario.
El inversor argentino busca seguridad jurídica y rentabilidad en dólares, más atractiva que la que se obtiene en Buenos Aires.
Se suman además las reglas poco claras que existen hoy en los alquileres del mercado argentino, con una ley que promete ser modificada pero lleva meses sin debatirse en el Congreso de ese país y el rumor constante de nuevos impuestos, como el que apunta a la vivienda ociosa, que desalientan a los inversores en ladrillos en Argentina.
"Hoy la rentabilidad en Montevideo en el caso de los edificios Promovida es en torno al 6% anual en dólares", dijo Martínez Vargas. Según los datos de la plataforma inmobiliaria Zonaprop, en Buenos Aires el retorno anual en moneda estadounidense se calcula 4%, aunque en muchos casos ese número apenas alcanza el 2,5%.
"En Uruguay, los precios de venta de los inmuebles tendrán un ajuste hacia arriba, acompañando la inflación anual. Esto indica que se enlentecerán la venta de apartamentos, no tendrá un ritmo vertiginoso, pero no se registrará una caída abrupta de las ventas", sostuvo el empresario inmobiliario.
El aumento de los precios —producto del incremento en los costos de la construcción como el hierro, aluminio y hormigón— "harán que las rentas tengan un leve descenso", indicó. Así todo, será más atractiva que la que se obtiene en Argentina.
La mayoría de los nuevos desarrollos se siguen volcando al sistema de Viviendas Promovidas impulsado por la exoneración de impuestos. "La costa de Montevideo comienza a tener proyectos premium. Esta tendencia continuará en los próximos años, no solo por constructores y desarrolladoras uruguayas, sino por un incremento de empresas constructoras extranjeras instalándose en nuestro país, cuyo target son las viviendas premium", finalizó.
Con información de El Cronista
