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Según Mujica, para el Mercosur "es imposible" hacer acuerdos con Europa
En su espacio radial Hablando al Sur, el senador y expresidente José Mujica se refirió al acuerdo entre el Mercosur y la Unión Europea, enfatizando que es preciso no ahondar en las confrontaciones internas que haya en Uruguay "porque hay una situación internacional diabólicamente compleja, llena de incertidumbres, dificultades y caídas de mercado".
El lunes, el embajador uruguayo en Bruselas, Walter Cancela, dijo que no está previsto un Tratado de Libre Comercio (TLC) entre el Mercosur y la Unión Europea a dos velocidades, tal como impulsan Brasil y Uruguay ante las resistencias del kirchnerismo argentino a un acuerdo en igualdad de condiciones. Las afirmaciones del representante del Poder Ejecutivo molestaron al gobierno, que ahora buscan suplantar al economista en su cargo.
Ante este panorama, Mujica opinó que "deberíamos aprender de nuestra historia reciente" y "si el mundo tiene incertidumbre" debemos "darnos cuenta de que la única fuerza positiva esta en nosotros mismos".
Asimismo, se refirió a Europa como un continente que dejó de ser referente, con el cual "es imposible acordar acuerdos para compensar las debilidades del Mercosur".
"Europa sufre las consecuencias de la competencia asiática, las consecuencias de su envejecimiento y oscila entre sueños antálgicos ultranacionalistas y manifestaciones contra el euro y las crudas leyes que impone y el avance mundial transnacional", indicó.
Asimismo, agregó que a pesar de su avance cosmopolita, es una Europa "muy envejecida. Con enormes claves científicas y culturales, pero que por momentos a uno le deja la sensación de que está dejando de ser".
Aun así, el exmandatario dijo que "hay que tener en cuenta que Europa no está fundida porque tiene una formidable acumulación histórica de capital, de experiencia, ciencia y cultura. Pero tiene una notoria tendencia al estancamiento y por momentos, con el peligro de equivocarnos, parece una crisis de época, no solo de coyuntura".
"Quienes soñábamos y pensábamos que Europa debía ser el platillo compensador de nuestra cada vez más notoria dependencia comercial con el mundo asiático, deberíamos empezar por darnos cuenta que los latinoamericanos estamos bastante solos y en el marco de nuestra soledad debemos arreglarnos y tratar las formas de multiplicar los rinconcitos del mundo donde podamos penetrar".
