Lo que importa sobre el cierre financiero de noviembre: dólares y reservas
- Dólar blue en baja: El dólar blue cierra noviembre a $1.115, con una caída mensual de $75 (-6,3%) y un descenso diario de $5. Este retroceso marca el quinto mes consecutivo de bajas nominales en el paralelo.
- Dólares financieros mixtos: El MEP sube a $1.080,17 (+0,5%) mientras que el contado con liquidación (CCL) baja a $1.105,61 (-0,2%). Ambos tipos de cambio financieros acumulan caídas mensuales del 4,6% y 4,7%, respectivamente.
- Intervención del BCRA: El Banco Central de la República Argentina (BCRA) terminó noviembre con compras netas de USD 1.437 millones, un resultado positivo gracias a la estacionalidad del comercio exterior y a las liquidaciones de divisas de exportadores.
- Impacto de la devaluación del real: A pesar de la caída del real brasileño, la brecha cambiaria se mantiene por debajo del 10%, alcanzando niveles no vistos desde 2019. Esto refleja un clima favorable para el peso argentino, aunque el real sigue siendo un factor de presión.
- Reserva de divisas: Las reservas internacionales de Argentina subieron a USD 31.636 millones a finales de noviembre, aunque cerraron el mes con una leve caída de USD 1.424 millones debido a salidas por depósitos de bancos.
Contexto
¿Por qué bajan los dólares paralelos? El dólar blue y los financieros, como el MEP y el CCL, mostraron una tendencia a la baja desde hace varios meses. Esta situación se debe, en parte, a la intervención activa del Banco Central para contener el alza de los dólares paralelos. Además, el blanqueo de capitales y las liquidaciones de exportadores aportaron divisas al mercado, generando un "veranito cambiario" que permitió reducir la brecha cambiaria. En noviembre, la oferta de dólares estuvo reforzada por estos factores, lo que permitió una caída de los tipos de cambio paralelos.
¿Qué está haciendo el BCRA para mantener la estabilidad cambiaria? El Banco Central realizó compras de dólares de manera sostenida a lo largo del mes de noviembre, sumando USD 1.437 millones. Esta estrategia tiene como objetivo reforzar las reservas internacionales, lo cual es clave para mantener la confianza en el peso argentino y continuar con el plan de estabilización macroeconómica. A pesar de los desafíos en la economía global, como la devaluación del real brasileño, el BCRA logró mantener un clima de calma cambiaria.
¿Por qué el real brasileño impacta sobre el peso argentino? El real brasileño, que experimentó una fuerte devaluación en noviembre, tiene un impacto directo sobre la competitividad de las exportaciones argentinas. Como Brasil es uno de los principales socios comerciales de Argentina, su devaluación hace que las exportaciones brasileñas sean más atractivas, lo que genera presión sobre el tipo de cambio argentino. Aunque el peso argentino se ve afectado por esta dinámica, la intervención del BCRA consiguió reducir el impacto en los tipos de cambio paralelos.
¿Cómo afectan estos movimientos a la brecha cambiaria? La brecha cambiaria, que es la diferencia entre el dólar oficial y los paralelos, fue reduciéndose gradualmente desde que el BCRA intensificó sus compras de divisas. A finales de noviembre, la brecha entre el dólar oficial mayorista y el CCL se situó en 9,3%, la más baja desde la reinstauración del cepo cambiario en 2019. Esto refleja una mejora en la percepción del mercado sobre la estabilidad cambiaria, aunque aún persisten riesgos.
¿Qué pasó con los bonos soberanos y el riesgo país? El mercado de bonos soberanos de deuda experimentó un rally alcista desde mediados de agosto, con subas significativas en noviembre. A pesar de algunas caídas recientes, el riesgo país disminuyó notablemente, con una baja del 23,3% solo en noviembre. Este descenso es una señal de la mayor confianza de los inversores en la estabilidad financiera de Argentina. Sin embargo, el riesgo país sigue siendo un indicador clave que los inversores siguen monitoreando, especialmente en un contexto global incierto.
Cómo sigue
¿Qué podemos esperar del dólar y las reservas en diciembre? Con el cierre de noviembre y el inicio de diciembre, es probable que el BCRA continúe con su estrategia de compra de dólares, buscando acumular más reservas. Esto es especialmente importante para mantener la estabilidad cambiaria y reducir la brecha entre el dólar oficial y los paralelos. Además, el sector exportador continuará siendo un factor clave en la oferta de divisas. Aunque la caída del real brasileño sigue siendo un factor de presión, la política cambiaria argentina parece estar encaminada a reducir el impacto de estos movimientos.
¿Habrá una unificación cambiaria en el corto plazo? Uno de los grandes interrogantes es si se alcanzará una unificación cambiaria en el corto plazo. Con la brecha cambiaria en niveles más bajos, el clima parece más propicio para una convergencia entre los distintos tipos de cambio. Sin embargo, la inflación y las presiones internas, como los vencimientos de bonos y la demanda de divisas por importadores, siguen siendo factores que podrían dificultar este proceso.
¿Qué impacto tendrá el contexto internacional en la economía argentina? A pesar de la calma cambiaria en el país, los movimientos en los mercados internacionales siguen siendo un factor a considerar. En particular, la evolución del real brasileño y el comportamiento de las tasas de interés en Estados Unidos pueden afectar la estabilidad de los mercados emergentes. Si bien Argentina se encuentra en una situación más firme que en el pasado para resistir choques externos, los inversores seguirán vigilando de cerca los desarrollos internacionales.
¿Qué papel jugarán los depósitos en dólares y el blanqueo de capitales? El blanqueo de capitales y el comportamiento de los depósitos en dólares seguirán siendo elementos claves para la estabilidad financiera. Aunque los depósitos en dólares del sector privado mostraron caídas, las expectativas de un clima de calma cambiaria podrían alentar a los ahorristas a seguir apostando por la estabilidad del peso. Además, la extensión del blanqueo podría seguir alimentando la oferta de divisas en el mercado cambiario.