El domingo 18 de mayo, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires vivió una elección legislativa atípica, tanto por su configuración como por su resultado. Por un lado, al no existir la instancia de las PASO, se presentaron 17 listas que compitieron por 30 bancas en la Legislatura porteña. El escenario resultó fragmentado, competitivo y cargado de tensiones internas. Este contexto favoreció un alto nivel de "canibalismo electoral", varios espacios políticos compitiendo por electorado similar.
Por otro lado, más allá de los nombres y las bancas, lo que se jugaba en esta elección era también el liderazgo del espacio opositor al peronismo. Tanto el PRO como La Libertad Avanza buscaron posicionarse como la referencia principal del voto no kirchnerista, disputando no solo electores, sino también el relato y las banderas del “cambio”.
En ese marco, si bien habían 17 listas, tan solo 4 de ellas se quedaron con el 80% de los votos. Mostrando en primer lugar que la municipalización de los temas no se dio y que fue una elección sumamente nacionalizada. En gran parte por los nombres que competían como cabezas de lista de los principales espacios.
Una de las grandes novedades de la elección del domingo fue la victoria de La Libertad Avanza, consiguiendo un poco más del 30% de los votos. Seguido por el espacio de Leandro Santoro con el 27% y en tercer lugar, el PRO con Silvia Lospennato que obtuvo el 16% de los votos. En ese sentido, LLA consiguió el triunfo en 22 barrios mientras que el peronismo se alzó con la victoria en los otros 26. Por primera vez desde que es gobierno, el PRO no triunfó en ningún barrio ni comuna. En los mapas a continuación se observa de manera más gráfica esto que se menciona.
La fortaleza del peronismo
En cuanto a los 3 espacios que más votos obtuvieron podemos encontrar similitudes y también diferencias con elecciones anteriores. En primer lugar, el peronismo no hizo de ningún modo una mala elección. Aunque sí se dio la situación en la que ese 2do lugar fue eclipsado por el triunfo de LLA y por las expectativas de victoria del espacio celeste (verde en este caso) que se habían instalado en las semanas anteriores. Pero más allá de eso, el peronismo confirmó que es un espacio históricamente más fuerte en el sur de la Ciudad y entre sectores populares. La mayor permeabilidad del peronismo se observa, elección tras elección, en el Sur de la Ciudad. Lo peculiar aparece en la Comuna 15 que se ha comportado, sostenidamente en el tiempo, como una especie de “isla” peronista en el territorio antiperonista al norte de la Ciudad. Consiguiendo allí, en las últimas 3 elecciones, resultados por encima de su resultado promedio.
Además, el peronismo en la Ciudad ha sostenido su principal núcleo de apoyo electoral entre los sectores populares, por lo que su performance electoral cae conforme mejoran las condiciones materiales y de accesibilidad del electorado.
Voto peronismo segun nivel economico.png
La debacle del PRO
En segundo lugar, vemos al PRO como uno de los grandes derrotados de la elección que pasó. Un espacio históricamente más fuerte en el norte de la Ciudad y entre sectores acomodados pero que no logró tener en esta elección la potencia electoral que tanto lo caracterizó en CABA. Como contracara del peronismo, históricamente, el PRO ha cosechado mejores resultados entre los sectores más pudientes del electorado porteño. El voto al PRO cae conforme se deterioran las condiciones materiales y de accesibilidad del electorado.
Por último, los grandes ganadores de la fecha fueron La Libertad Avanza, Javier Milei y Manuel Adorni. Se consolidó como el nuevo representante del antikirchnerismo en la Ciudad. Logró canalizar la pulsión mayoritaria que históricamente ha rechazado al peronismo y sus expresiones en la Ciudad. Además, se alzó como la expresión del cambio deseado. Conectando con un electorado porteño de fuerte carácter conservador que, hasta ahora, recelaba del “salto al vacío” libertario. Finalmente, logró ampliar su apoyo entre los desilusionados con el gobierno nacional de Mauricio Macri. Para una parte importante del electorado porteño, Macri fue el presidente que no supo, no pudo o no quiso. Las urnas confirmaron que hoy LLA ocupa ese espacio.
Voto PRO segun nivel economico.png
El crecimiento libertario
Es interesante detenernos un momento en el recorrido electoral del espacio violeta en la Ciudad. En su debut electoral, el espacio libertario pisó fuerte en el Sur de la Ciudad pero también en barrios históricamente fuertes para el PRO como Villa Devoto, Recoleta, Retiro o Puerto Madero. De hecho, esa transversalidad la evidencia la corta distancia entre su peor (Villa Crespo 14%) y su mejor resultado (Puerto Madero 20%) que fue de apenas 6 puntos.
En el año 2023, profundizó sus conquistas en el Sur de la Ciudad y tuvo un leve deterioro en el Norte. Consecuentemente, la distancia entre el mejor (Villa Soldati 28%) y el peor resultado (Colegiales 16%) fue de 12 puntos, el doble respecto a 2021.
Finalmente, en las recientes elecciones, LLA logró seducir exitosamente a sectores acomodados y del norte de la Ciudad que históricamente votaron al PRO.
En su mejor versión electoral, la más reciente, La Libertad Avanza cosechó más apoyo entre los sectores más pudientes del electorado porteño. El gráfico de arriba sugiere la migración de votantes del PRO a LLA. Un perfil de votante que coincide con aquel que históricamente voto al PRO. Que además se evidencia muy claramente cuando observamos el decrecimiento y el crecimiento de una y otra fuerza entre el 2023 y el 2025.
Voto LLA segun nivel economico.png
LLA y PRO, solapados
El solapamiento territorial del crecimiento de LLA y el deterioro del PRO como fuerza electoral evidencia la migración de votantes del PRO hacia el espacio libertario y explica el triunfo de Manuel Adorni en las elecciones porteñas.
Por otro lado, si bien el espacio de Javier Milei había demostrado transversalidad en años anteriores en esta elección no se dio esta situación. La Libertad Avanza mostró sus límites para crecer dentro del electorado peronista. Es decir, principalmente los sectores populares y del sur de la Ciudad. De alguna manera, para el 2025, todo o la gran mayoría de lo que tenía para conquistar en el electorado peronista, LLA ya lo había seducido en 2021 y 2023.
Por último, no podemos dejar de mencionar la baja en la participación que se ha convertido en una constante de las distintas elecciones provinciales que se han realizado este año. Incluso, al momento CABA registró el nivel de participación más bajo del calendario electoral 2025. La resignación de la sociedad y el hartazgo con la clase política, se evidencia más que nunca en el ausentismo registrado e interpela fuertemente a la clase dirigente de nuestro país que necesita, urgentemente, renovarse y ofrecer nuevas sentidos a la identidad partidaria e ideológica. Adicionalmente, hay que tener en cuenta que eran unas elecciones en las que se ponían en juego cuestiones políticas pero que no tenían necesariamente una gran relevancia para la gente.
Voto PRO y LLA solapados.png
Con todo, las elecciones provinciales anticipadas funcionan como unas PASO sin PASO que, sin dudas, ayudarán a ordenar la oferta política y las negociaciones de cara a las elecciones nacionales. Pero también ofrecen una brújula para que la ciudadanía defina sus preferencias y expectativas con más información y herramientas para el cálculo electoral.
Algunos interrogantes finales, ¿La Libertad Avanza mostró sus límites para dañar electoralmente al peronismo porteño? ¿Daño al PRO todo lo que puede dañarlo? ¿Dónde están sus límites para fagocitar al espacio amarillo? ¿Veremos estás dinámicas también a nivel nacional?