El Congreso vive una tensa calma. El fin del periodo ordinario y la incertidumbre sobre la convocatoria a sesiones extraordinarias y su temario monopoliza las charlas entre los legisladores que se preparan para trabajar durante el verano.
“Lo más probable es que nos tengan discutiendo cualquier cosa menos el presupuesto”, asegura uno de los asesores del principal bloque opositor en Diputados y agrega: “el Gobierno jugará con temas de alto impacto mediático en los que pueda imponer la grieta, sin importar el resultado”.
En el Senado, por su parte, la incertidumbre es aún mayor. Sin lazos comunicantes entre la Casa Rosada y la presidencia de la Cámara alta, los funcionarios legislativos están convencidos de que se enterarán por los portales de la convocatoria.
Los aliados condicionan el quórum de las sesiones extraordinarias
En ambas Cámaras, los bloques aliados al Gobierno, eso que se llamó Juntos por el Cambio, ya advirtieron que no se sentarán a dar quórum durante el periodo extraordinario, salvo que dentro del temario este el Presupuesto 2025 y el proyecto de Ficha Limpia.
Si bien desde el Ejecutivo el prometieron a los gobernadores que la ley de leyes será parte del temario que enviará el Ejecutivo al Congreso, la desconfianza es la que reina.
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Cristian Ritondo, presidente del bloque PRO en Diputados
Desde las entrañas del bloque oficialista, pese a que no tienen certezas, apuestan a que la lista de temas que se podría tratar durante el verano incluye la reforma política que contiene la eliminación de las PASO y los cambios en el financiamiento de la política, el proyecto que establece el juicio en ausencia y la ley de reiterancia.
“Son temas que los aliados están obligados a acompañar, no se pueden hacer los distraídos por más que no esté el presupuesto en el temario”, apuntan desde el bloque libertario.
En el Congreso dan por sentado que la posición de Santiago Caputo se impondrá y habrá sesiones extraordinarias y que el temario contendrá temas que sean difíciles de evitar. Una apuesta a lo que desde el oficialismo llaman “principio de revelación”.
El regreso de Juntos por el Cambio
Con los puentes casi totalmente rotos con el oficialismo, la UCR, el PRO y la Coalición Cívica aceitaron más sus charlas. Y casi en espejo con el comienzo del año electoral la posibilidad de recrear Juntos por el Cambio empieza a parecer como cierta.
La discusión por ficha limpia terminó por demarcar una línea que empieza a ser cada vez más gruesa y que no sólo tendrá incidencia en el trabajo parlamentario, sino que tendrá su correlato más contundente en el armado de listas de cara a las elecciones legislativas del 2025. Una posibilidad que aparecerá más clara si el gobierno logra sancionar la reforma política.
En ese marco desde el PRO y el Kirchnerismo ven un panorama similar. “Vamos a una elección de tercios”, sostienen en ambas bancadas.
Más allá de lo electoral, y en el marco de una magra performance legislativa, las cuentas pendientes que el oficialismo podría llevar a extraordinarias son muchas. El tratamiento de los jueces de la Corte Suprema es uno de los temas centrales que aún no tuvieron resolución, pese a que los pliegos ya ingresaron y los postulantes a los cargos, tanto Ariel Lijo, Como Manuel García Mansilla, ya expusieron ante la Comisión de Acuerdos.