El Gobierno informó este miércoles sobre la reciente detección por parte de la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE) de una operación de espionaje que involucra a ciudadanos rusos residentes en el país, quienes estarían trabajando en actividades sospechosas a favor de los intereses geopolíticos de Rusia. A través de una rueda de prensa, el vocero presidencial, Manuel Adorni, explicó que estas personas formaban parte de una organización conocida como "La Compañía", vinculada a otros proyectos de influencia internacional del Kremlin, como el "Proyecto Lakhta".
La investigación de la SIDE y las implicaciones internacionales
Según Adorni, la investigación realizada por los servicios de inteligencia argentinos reveló que los integrantes de esta red, que operaban bajo la coordinación de Moscú, tenían como objetivo crear una estructura de apoyo leal a los intereses rusos dentro de la sociedad argentina. Entre sus actividades se encontraba la creación y difusión de contenidos en redes sociales, la manipulación de organizaciones civiles y ONG locales, y la recopilación de información política útil para Rusia.
La SIDE identificó a Lev Konstantinovich Andriashvili, un ciudadano ruso radicado en Argentina, como el líder de esta operación. Junto a él, su esposa Irina Iakovenko, también de nacionalidad rusa, habría colaborado activamente en la organización. Adorni detalló que, como parte de sus labores, Andriashvili y Iakovenko recibieron financiamiento para establecer conexiones con colaboradores argentinos y realizar actividades de influencia política en el país.
El vocero del presidente también reveló que "La Compañía" tiene una vinculación directa con el "Proyecto Lakhta", una operación liderada por el oligarca Yevgeniy Prigozhin, quien falleció en agosto de 2023. Este proyecto, impulsado por los servicios de inteligencia rusos, fue vinculado con campañas de desinformación en diversos países, buscando influir en procesos electorales y en la opinión pública a través de la manipulación de plataformas digitales.
¿Qué es el "Proyecto Lakhta"?
El "Proyecto Lakhta" es un conjunto de actividades de desinformación y manipulación impulsado por los servicios de inteligencia rusos, cuyo objetivo es influir en la política interna de diversos países. Este proyecto fue relacionado con las campañas de desinformación durante las elecciones en Estados Unidos y Europa, donde se utilizó la manipulación de redes sociales y la creación de narrativas falsas para modificar la opinión pública y los resultados electorales.
La operación tiene como base el uso de herramientas tecnológicas avanzadas y la creación de redes de apoyo en distintos países, las cuales pueden incluir desde ciudadanos comunes hasta organizaciones civiles, con el fin de generar apoyo a los intereses rusos. La denuncia realizada por el gobierno argentino deja en evidencia la creciente preocupación internacional por la expansión de estas operaciones de influencia y los riesgos que suponen para la seguridad de los estados democráticos.
El antecedente de los espías Dultsev y las preocupaciones sobre la infiltración rusa
La revelación de esta nueva operación de espionaje recuerda a otros casos recientes de infiltración rusa en Argentina, como el de los espías Artiom Dultsev y Anna Dultseva, quienes vivieron en el país durante varios años bajo identidades falsas y fueron parte de una red de espionaje vinculada al gobierno de Vladimir Putin. Su historia terminó con su detención en Eslovenia, su posterior intercambio por prisioneros y su regreso a Rusia con honores.
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Los espías rusos que fingieron ser argentinos fueron recibidos por Putin cuando volvieron a su país
En ese sentido, el gobierno argentino expresó su preocupación por el creciente número de ciudadanos rusos que llegaron al país desde 2022, en el contexto de la invasión a Ucrania. En especial, se teme que parte de este flujo migratorio esté compuesto por agentes del Kremlin que operan de forma encubierta. El acuerdo de exención de visas firmado entre Argentina y Rusia en 2009, vigente hasta la fecha, fue señalado como un factor facilitador de este tipo de actividades.
Reacción del Gobierno y nuevas medidas de seguridad
El anuncio de la SIDE sobre la infiltración de espías rusos coincide con otras medidas de seguridad que el gobierno de Argentina implementó recientemente. En ese sentido, Adorni destacó la creación del Departamento Federal de Investigaciones (DFI) dentro de la Policía Federal, un organismo que estará destinado a la investigación de actividades criminales de alto impacto, incluyendo el narcotráfico, el terrorismo y el crimen organizado. El DFI contará con un perfil renovado de investigadores, quienes recibirán capacitación en nuevas técnicas de investigación y se incorporarán especialistas en áreas como psicología social y ciencias de la computación.
El vocero presidencial subrayó que, con la creación de este nuevo organismo, Argentina busca alinearse con los estándares internacionales en materia de seguridad y que la seguridad nacional seguirá siendo una prioridad absoluta. En cuanto a la amenaza que representan estas redes de espionaje, el vocero afirmó: "La seguridad de los argentinos no es un tema secundario", señalando que el país no será sometido a la influencia de otras naciones.
Este tipo de infiltraciones refleja un escenario de creciente tensión internacional, donde los actores globales, especialmente los vinculados al gobierno ruso, buscan ampliar su influencia en países estratégicos mediante operaciones de inteligencia y manipulación política. En este contexto, el gobierno argentino afirmó que tomará todas las medidas necesarias para garantizar la soberanía del país y proteger a los ciudadanos frente a cualquier intento de injerencia externa.
