El ministro de Salud, Mario Antonio Russo, renunció a su cargo tras 10 meses de gestión en el Gobierno de Javier Milei. La dimisión fue presentada formalmente el jueves por la tarde en la Casa Rosada, donde se reunió con el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, y el asesor presidencial Santiago Caputo. Fuentes oficiales confirmaron que la salida del funcionario responde a "motivos personales" y que fue acordada en buenos términos. Posteriormente, Russo mantuvo una conversación con el propio presidente Milei, quien aceptó su renuncia sin inconvenientes.
El Gobierno ya tiene definido su reemplazo: el cardiólogo Mario Lugones, ex titular del Sanatorio Güemes y fundador de la Fundación Güemes, será el nuevo ministro de Salud. La Oficina del Presidente emitió un comunicado oficial destacando la "extensa carrera" de Lugones, quien es visto como un hombre cercano a Santiago Caputo, asesor clave del Gobierno.
Embed - https://publish.twitter.com/oembed?url=https://x.com/OPRArgentina/status/1839480101982830592&partner=&hide_thread=false
El cambio en el Ministerio de Salud ocurre en un contexto de tensiones internas y desafíos presupuestarios que afectaron la gestión de Russo, especialmente en relación con la epidemia de dengue que azotó al país a principios de año. Aunque fuentes cercanas a la Casa Rosada negaron que la salida del ministro fuera producto de un desplazamiento, trascendieron diferencias en torno a la asignación de recursos y la distribución de vacunas, lo que habría generado conflictos con otros sectores del Ejecutivo.
El Ministerio de Salud es una de las áreas más sensibles del Gobierno, y la gestión de Russo no estuvo exenta de dificultades. Uno de los momentos más críticos de su mandato fue la histórica epidemia de dengue que afectó al país durante el verano. El brote puso en jaque a las autoridades sanitarias y a su capacidad de respuesta ante la escasez de insumos como el repelente, que durante varios días faltó en el área metropolitana de Buenos Aires.
Además, en las últimas semanas trascendieron discrepancias respecto a la asignación presupuestaria del Ministerio. A pesar de que la cartera de Salud fue una de las que recibió más recursos en términos absolutos para el presupuesto de 2025 —junto a los ministerios de Capital Humano, Seguridad y Defensa— el incremento fue del 6,2%, el más bajo en comparación con los demás ministerios. Este contexto habría provocado tensiones en el seno del Gobierno, aunque las autoridades oficiales insisten en que la renuncia de Russo no fue forzada.
En el marco de su última aparición pública, durante una reunión del Consejo Federal de Salud (COFESA), Russo había destacado el trabajo conjunto entre las provincias y el Gobierno Nacional para enfrentar los desafíos sanitarios. "El desafío de reordenar y mejorar el sistema de salud es una tarea en la que estamos todos juntos", afirmó en esa ocasión. Sin embargo, días después, el ministro decidió poner fin a su gestión, aduciendo motivos personales.
El perfil del nuevo ministro: Mario Lugones
Mario Lugones, el cardiólogo que reemplazará a Russo al frente del Ministerio de Salud, cuenta con una vasta trayectoria en el ámbito de la salud privada. Durante varios años estuvo a cargo del Sanatorio Güemes y fundó la Fundación Güemes, una institución dedicada a la docencia médica y la investigación clínica. Según se informó desde la Casa Rosada, su designación fue impulsada por su cercanía con Santiago Caputo, quien juega un rol clave dentro del círculo íntimo de Milei.
En el comunicado oficial emitido tras la renuncia de Russo, el Gobierno destacó la experiencia de Lugones en la gestión sanitaria y su perfil técnico. "A lo largo de su carrera, Lugones fue jefe de clínica de la Unidad Coronaria del Sanatorio Güemes, además de médico cardiólogo de instituciones como la Fundación Favaloro y Praxis Médica. También se desempeñó como director del Instituto Médico de la Seguridad Social y Evaluación Tecnológica (IMSSET) de la Facultad de Medicina de la UBA", detalló el texto.
Fuentes del entorno libertario habían señalado a Lugones como un posible "ministro en las sombras" desde hace varios meses, debido a su activa participación en reuniones estratégicas con funcionarios del Gobierno. Finalmente, su nombre se impuso sobre otras posibles candidatas, como Cecilia Loccisano, esposa del ex ministro macrista Jorge Triaca, quien también sonaba fuerte en los pasillos de la Casa Rosada.
Con la llegada de Lugones al Ministerio de Salud, se espera que el nuevo ministro enfoque su gestión en la continuidad de las políticas sanitarias actuales, especialmente en lo que respecta a la campaña de vacunación y la prevención de nuevas epidemias como el dengue. Su perfil técnico y su experiencia en el ámbito de la medicina privada son vistos como activos valiosos para enfrentar los desafíos que la salud pública argentina tiene por delante.
Tensiones dentro del Gobierno y cambios en el Gabinete
La renuncia de Mario Russo es la segunda baja significativa en el Gabinete de Javier Milei desde el inicio de su mandato en diciembre de 2023. La primera ocurrió en enero, cuando Guillermo Ferraro, ministro de Infraestructura, dejó su cargo a tan solo 45 días de iniciado el gobierno. A diferencia de la salida de Russo, la de Ferraro fue consecuencia de un desplazamiento decidido por el propio presidente, quien consideró necesario un cambio en esa área estratégica.
Cuatro meses después, en mayo, se produjo otro desplazamiento importante con la salida del jefe de ministros, Nicolás Posse, lo que evidenció la rotación de altos funcionarios en el Gabinete. La salida de Russo se enmarca en un contexto de revisión interna dentro del Poder Ejecutivo, donde más de 70.000 empleados contratados en distintos ministerios, entre ellos el de Salud, Justicia y Capital Humano, están en evaluación. Según confirmó el vocero presidencial, Manuel Adorni, todos esos puestos están siendo revisados y se tomarán decisiones antes de fin de septiembre.
Por su parte, Russo, de perfil bajo y buen trato, optó por retirarse del cargo sin generar mayores tensiones. Su trayectoria en el ámbito público y privado es extensa. Graduado de la Universidad Nacional de Buenos Aires, es especialista en cuidados perioperatorios de cirugía cardiovascular. Antes de asumir como ministro de Salud, fue secretario de Salud en los municipios de San Miguel y Morón, y subsecretario de Coordinación de Políticas Sanitarias durante la gobernación de María Eugenia Vidal en la provincia de Buenos Aires.
Con la renuncia de Russo y la asunción de Lugones, el Ministerio de Salud enfrenta una nueva etapa en un contexto marcado por las expectativas de mejorar la gestión sanitaria en un país que sigue enfrentando desafíos epidemiológicos y estructurales. La designación de Lugones marca un nuevo capítulo en la cartera, donde las prioridades serán la continuidad de las políticas en curso y la búsqueda de mayor eficiencia en la asignación de recursos para mejorar el sistema de salud.