Contexto
¿Qué motivó el crimen de Susana Montoya?
El móvil del crimen fue un conflicto familiar relacionado con la indemnización por la desaparición de Fermín Albareda, padre de Fernando y militante del Partido Revolucionario de los Trabajadores (PRT), secuestrado y asesinado por la dictadura. Susana Montoya, madre de Fernando y Ricardo, había prometido entregar parte de los $76 millones que recibiría por la desaparición de su marido a sus nietos (los hijos de Fernando). Sin embargo, poco antes del cobro, Montoya cambió de opinión y decidió destinar la indemnización a su otro hijo, Ricardo. Esto generó un conflicto con Fernando, quien sentía que la decisión era injusta, especialmente porque su hermano, Ricardo, nunca había trabajado y siempre dependió económicamente de su madre.
¿Cómo se desarrolló el crimen y cuál fue la versión de Fernando Albareda?
Fernando Albareda, en su declaración desde la cárcel de Bouwer, detalló cómo cometió el crimen. Según su relato, el 2 de agosto de 2024, su madre salió al patio de la casa para alimentar a los perros y él la siguió, cegado por la furia. "Le agarré una soga, se la envolví en el cuello y la ahorqué, diciéndole que me había dejado sin padre, que me había hecho pasar un momento terrible de mi vida y que se estaba metiendo con mi familia", declaró. Aunque reconoció que el acto no fue premeditado, sí admitió haberse "preparado" para el crimen. Según su versión, su decisión fue impulsada por la sensación de injusticia por la actitud de su madre hacia sus hijos.
¿Qué papel jugó el contexto político y personal en el crimen?
El contexto político y personal de Fernando Albareda es clave para entender el trasfondo de la tragedia. Como integrante de H.I.J.O.S., organización que lucha por la memoria y la justicia de las víctimas de la dictadura, Fernando había sufrido desde joven la desaparición de su padre, lo que lo marcó profundamente. Años después, al enterarse de la verdadera militancia de su padre y de su muerte en manos del terrorismo de Estado, Fernando se unió a la organización para buscar justicia. Sin embargo, su relación con su madre fue siempre tensa, especialmente por la falta de apoyo emocional en su infancia y la ausencia de respuestas de ella frente a sus denuncias de abusos durante su internación en un instituto de menores.
¿Qué ocurrió tras el hallazgo del crimen?
El 2 de agosto de 2024, el cuerpo de Susana Montoya fue encontrado en el patio de su casa con signos de violencia: golpes en la cabeza y cortes realizados con un arma blanca. Además, en la pared de la vivienda apareció una inscripción que decía: "Los vamos a matar a todos. Ahora vamos por tus hijos". Las autoridades inicialmente creyeron que podría tratarse de un ataque relacionado con amenazas previas de Fernando, pero los análisis de la Policía Judicial revelaron que los grafismos coincidían con los de Fernando Albareda. La investigación también mostró que las cámaras de seguridad cercanas registraron su llegada y salida de la casa el 1 de agosto, lo que consolidó la sospecha de su implicación en el crimen.
¿Qué implicancias tiene esta confesión para la investigación y la justicia?
La confesión de Fernando Albareda complica su defensa, que había intentado instalar una hipótesis de amenazas relacionadas con grupos vinculados a la dictadura. Ahora, la causa se encuentra en la etapa de juicio, con Albareda como principal sospechoso del homicidio. La Cámara de Acusación de Córdoba ratificó su prisión preventiva y rechazó los planteos de nulidad presentados por su defensa, lo que indica que el proceso judicial continuará sin interrupciones.
Cómo sigue
El caso de Fernando Albareda está en la recta final hacia el juicio, y en las próximas semanas se analizarán las pruebas y testimonios en detalle. El acusado sigue bajo prisión preventiva mientras se define su futuro en el proceso judicial. La causa no solo conmocionó a la sociedad cordobesa por la brutalidad del crimen, sino también por las complejidades familiares y políticas que subyacen en este trágico episodio. La justicia tendrá que dirimir si las circunstancias del crimen, el historial de abuso y el contexto de la militancia de Albareda influirán en su sentencia.