Susana Beatriz Montoya, la jubilada de 74 años que fue hallada sin vida en su casa de Córdoba, era viuda de Ricardo Fermín Albareda, un subcomisario que fue torturado y asesinado luego de haber sido desaparecido en 1979. También era la madre de Fernando Albareda, militante de H.I.J.O.S.
La mujer fue encontrada este sábado sin vida en una escena escalofriante. Yacía muerta con un arma blanca que estaba incrustada en su cuello. Además, había machas de sangre y la huella de la mano izquierda de la víctima.
Los motivos del crimen todavía no fueron esclarecidos. En el interior de la vivienda, los presuntos responsables dejaron una amenaza en una de las paredes. “Los vamos a matar a todos HDP”, fue la frase que encontraron los policías, de acuerdo con la información obtenida por el medio cordobés Cadena 3.
Tras el crimen de la mujer, distintos organismos de Derechos Humanos se expresaron al respecto y exigieron “a la Justicia de Córdoba y al Poder Ejecutivo” que se esclarezca el caso y que se proteja al hijo de la víctima.
La jubilada era la madre de Fernando Albareda, uno de los militantes de H.I.J.O.S que ya había recibido otro tipo de amenazas. Además, Susana Montoya solía formar parte de las jornadas en las que pedía justicia por su esposo.
Organismos de Derechos Humanos de Córdoba emitieron un comunicado en el expresaron su preocupación y consternación ante el asesinato.
El hallazgo de la mujer fue en el domicilio de la víctima, ubicado en barrio Ampliación Poeta Lugones. La Policía constató que presentaba heridas cortantes y golpes.
Otras amenazas recibidas por Fernando Albareda y su familia desde hacía tiempo
En mayo pasado fue arrancado el cartel que señalizaba a la "Casa de Hidráulica" como espacio de memoria y ex centro clandestino de detención, torturas y exterminio.
A través del comunicado que firmaron en conjunto, H.I.J.O.S. Córdoba, Abuelas de Plaza de Mayo Córdoba, Familiares de Desaparecidos y Detenidos por Razones Políticas Córdoba, Ex Presos Políticos por la Patria Grande, la Asociación de Ex Presos Políticos Córdoba y la Mesa de Trabajo por los Derechos Humanos exigen a la Justicia de Córdoba y al Poder Ejecutivo, "la urgente investigación y esclarecimiento de este hecho, como así también las amenazas sufridas por todos los integrantes de su familia, denunciadas con anterioridad"; y "la seguridad y protección EFECTIVA YA al compañero Fernando Albareda y a toda su familia".
El documento concluye, vinculando este crimen a los llamados "discursos de odio que permanentemente circulan en nuestra sociedad", a los que considera un "peligro latente" cuando "verdaderamente pasan a la acción".
En la llamada "Causa Albareda", se certificó que Ricardo Fermín Albareda, que era subcomisario de la Policía y militaba en el PRT, fue secuestrado, torturado, asesinado y desaparecido por la dictadura cívico militar en septiembre de 1979 en la llamada "Casa de Hidráulica", ubicada a la vera del Lago San Roque.
Los restos de la mujer fueron despedidos este lunes en medio de un clima de consternación en el que se reclamó justicia y rápido esclarecimiento.
Además de organismos de derechos humanos, dirigentes políticos como la diputada Myriam Bregman se expresaron sobre el tema. En su cuenta de X (ex Twitter) declaró: “Lo ocurrido en Córdoba es muy grave. Exigimos el urgente esclarecimiento del crimen del que fue víctima Susana Montoya, mamá de Fernando Albareda. Nos solidarizamos con la familia. Verdad y justicia”.
Los investigadores mantuvieron bajo reserva cualquier sospecha que se pudiera tener hasta el momento. Aún así, informaron que el domicilio no tenía daños ni forcejeos, lo cual podría transformarse en una pista clave.
Aún restan los resultados de la autopsia realizada sobre el cuerpo de la jubilada y el hallazgo de cualquier otro indicio que pudiera conducir a los responsables. No obstante, plantearon que la mujer podría haber recibido un golpe en la cabeza y que, posteriormente, habría sido asesinada de un puntazo en el cuello.