Un viaje familiar que se inició con la emoción de las vacaciones terminó con un giro inesperado y desolador para una familia neuquina que estaba en Chile. Al intentar regresar a través del paso fronterizo de Los Libertadores-Cristo Redentor, fueron interceptados por una banda de delincuentes que les arrebató todo, incluyendo un vaciamiento de sus cuentas bancarias.
Los argentinos se encontraban en ese lugar de manera transitoria, ya que su verdadero destino era Colombia, donde disfrutaron de sus vacaciones. Con la intención de aprovechar las tarifas económicas, la familia optó por cruzar en automóvil al país vecino y luego tomar su vuelo. Por lo tanto, al regresar, siguieron el recorrido en sentido contrario.
María José, una de las víctimas, compartió a LMNeuquén lo que ocurrió la madrugada del sábado pasado. En ese momento, decidieron detenerse en una estación de servicio para abastecer la nafta de su vehículo, un Volkswagen Taos, que estaba listo para llevarlos de regreso a casa, luego del viaje a Chile.
“A unos 150 metros antes de llegar, se nos cruzó un auto que nos choca y de donde se bajaron cuatro personas. Una quinta quedó adentro del auto, manejando”, relató. Añadió que los asaltantes ocultaban sus rostros tras barbijos. Describiendo la táctica empleada, explicó: “Esos golpes nos inhabilitaron, no podíamos pensar, no sabíamos qué estaba pasando. Tampoco podían salir, nos cruzaron el auto de tal forma que quedamos atrapados”.
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En un abrir y cerrar de ojos, los agresores rodearon la camioneta, arremetiendo contra las ventanillas. “Cuando lograron abrir el vehículo, empezaron a sacar las cosas que teníamos a manos, nos bajaron; y el más pequeño de mis hijos, que iba en su sillita, en el susto se desató él y se cayó al abrirse la puerta. Esa fue la situación más violenta. Después, no nos hicieron nada. Dos de los delincuentes se subieron a nuestra camioneta y los otros tres se fueron en un auto color gris, chico. Todo fue muy rápido, minutos”, concluyó.
La familia continúa enfrentando las secuelas del incidente, más allá de la pérdida de sus pertenencias. Entre las consecuencias se incluye el bloqueo de sus dispositivos móviles, el acceso a sus computadoras personales y sus perfiles en las redes sociales, así como el vaciamiento completo de todas sus cuentas bancarias.
Después del asalto, buscaron refugio en una estación de servicio. Allí, recibieron asistencia del personal mientras aguardaban la llegada de la policía. “Nos llevaron hasta una comisaría, nos atendieron muy bien, nos dieron un lugar donde mis hijos pudieron descansar. Pasamos la noche ahí, y lo que nos dijeron fue que como era un caso internacional tenía que intervenir la PDI (Policía de Investigaciones)”, relató.
Según les informaron los propios oficiales, situaciones como la que vivieron son lamentablemente frecuentes. Los delincuentes suelen apuntar a vehículos con matrícula argentina, buscando robar tanto las compras realizadas como el efectivo destinado a ellas.
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“Nosotros creemos que fue al voleo; y el motivo de hacerlo público es que otras personas tengan conocimiento de lo que está pasando”, expresó María José.
La afluencia masiva de ciudadanos argentinos a Chile en los últimos meses, motivada por la diferencia favorable en los precios, está generando congestión y desafíos logísticos en el principal paso fronterizo, Cristo Redentor.
A pesar de las medidas implementadas por las autoridades para acelerar los procesos fronterizos y agilizar el paso, esta semana se produjeron nuevamente retrasos significativos. Algunos individuos reportaron esperas de hasta cuatro horas en el área de control.
Los retrasos en el cruce se deben a la rehabilitación del Paso Internacional, que se llevó a cabo el martes por la mañana, tras haber estado cerrado por varios aludes que cubrieron la calzada de la Ruta 7, obstaculizando el paso. Se requirió más de un día de esfuerzo por parte de Vialidad para limpiar la carretera y reanudar el tránsito.
