Grecia vive este martes una jornada de paralización casi total debido a una huelga general convocada por los principales sindicatos del país, en protesta contra la propuesta del Gobierno de ampliar la jornada laboral hasta las 13 horas diarias.
La medida, impulsada por el Ejecutivo como parte de su estrategia para reactivar la economía, ha sido duramente criticada por organizaciones laborales, que denuncian un retroceso en los derechos de los trabajadores.
Actualmente, la jornada laboral en Grecia es de ocho horas, con posibilidad de hasta tres horas extras. No obstante, ya se ha legalizado la semana laboral de seis días en ciertos sectores como el turismo.
El transporte público ha sido uno de los servicios más afectados por la huelga. En Atenas, el servicio urbano opera solo en horarios limitados, mientras que los trabajadores de tranvías suburbanos y otras líneas permanecen en paro durante 24 horas. Aunque el transporte marítimo también registra alteraciones, no se han reportado cancelaciones de vuelos, según la agencia Amna.
Propuesta de 35 horas semanales
Los sindicatos han calificado la propuesta como una “regresión medieval” y han exigido su retirada inmediata. En su lugar, proponen establecer una jornada laboral de 35 horas semanales, es decir, siete horas al día.
El Gobierno sostiene que la medida sería voluntaria, limitada a 37 días al año y siempre con remuneración adicional, buscando mejorar la competitividad económica del país.
Sin embargo, la Confederación Griega de los Trabajadores advierte que muchos empleados no podrán rechazar estas extensas jornadas por la presión laboral y las condiciones de precariedad.
Esta es la segunda huelga general en menos de un mes, en un clima de creciente tensión entre el Ejecutivo y las organizaciones sindicales, justo cuando el Parlamento se prepara para debatir la controvertida reforma laboral.
FUENTE: El Observador
