Con más de 250 años de historia, Trooping the Colour se ha consolidado como uno de los eventos más emblemáticos de la monarquía británica. Esta tradicional exhibición militar, que conmemora el cumpleaños oficial del soberano cada mes de junio, reúne a más de 1.400 soldados, 200 caballos y 400 músicos en un imponente desfile que avanza desde Buckingham Palace hasta Horse Guards Parade. El evento culmina con el icónico saludo desde el balcón real.
En la última década, Kate Middleton, princesa de Gales, ha sido la figura más destacada en la celebración. Desde su primera aparición en 2011, poco después de su boda con el príncipe William, la duquesa ha cautivado al público con su impecable estilo. Este año, su aparición en el Trooping the Colour 2025 no ha sido la excepción, especialmente al estar marcada por su recuperación tras ser diagnosticada con cáncer, lo que hizo de esta ocasión aún más significativa.
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Para esta edición, Kate eligió un elegante vestido-abrigo en tono aguamarina de la firma Catherine Walker, marca estrechamente asociada a su suegra, Diana de Gales, quien la vistió en algunos de sus momentos más emblemáticos.
El diseño, conocido como "Bria", destaca por su silueta estructurada, líneas depuradas y detalles como las solapas y puños en contraste blanco. Con una inspiración ligeramente militar, el conjunto se presentó como un guiño a Lady Di, un homenaje a la figura de la difunta princesa y su legado dentro de la familia real.
Lo especialmente significativo de esta elección es que Kate se ha decantado este año por Catherine Walker en lugar de la habitual Alexander McQueen, firma que ha dominado sus elecciones de vestuario para este evento desde 2011.
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A lo largo de los años, McQueen fue la elección recurrente de Kate para Trooping the Colour, con modelos que incluyeron tonos suaves como el blanco, rosa empolvado y azul, siempre con la fórmula del vestido-abrigo y un tocado coordinado.
Este giro en su elección de diseño podría interpretarse como un homenaje a su suegra, Diana, y una forma de conectar el pasado con el presente en un año tan cargado emocionalmente para Kate.
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La princesa de Gales no solo deslumbró con su estilo, sino que con su elección de atuendo mostró una narrativa que une generaciones dentro de la monarquía británica, convirtiendo este Trooping the Colour en una edición inolvidable.
