La Vuelta Ciclista a España ha sido marcada por un clima de tensión debido a las protestas propalestinas en varias etapas, con incidentes destacados que interrumpieron el curso de la carrera.
En la penúltima etapa, un grupo de 100 manifestantes intentó bloquear la carretera a unos 18 kilómetros de meta, a la altura de Becerril de la Sierra, interrumpiendo el paso de los ciclistas.
Los corredores tuvieron que esquivar a los manifestantes para continuar, mientras que los coches y motos quedaron bloqueados durante unos instantes.
La policía localizó a los manifestantes y evitó que la protesta detuviera por completo la carrera. El incidente no impidió que el danés Jonas Vingegaard se impusiera en la cima de la Bola del Mundo.
Desvío en Cercedilla por protestas
El mismo día, la organización de la Vuelta decidió desviar el recorrido en su paso por la localidad madrileña de Cercedilla debido a las protestas a favor de Palestina. Los ciclistas bordearon la localidad y continuaron por la carretera de Los Molinos, lo que también significó la eliminación del sprint bonificado que se celebra en la zona. La protesta, que se ha replicado durante todo el recorrido de la Vuelta, responde a la participación del equipo Israel-Premier Tech y la repulsa por el conflicto en Gaza.
Llamamiento a un boicot en la etapa final
La líder de Podemos, Ione Belarra, hizo un llamamiento para boicotear la etapa final de la Vuelta, que llegará a Madrid este domingo. En declaraciones previas, Belarra instó a la sociedad a un "desborde" de movilización en solidaridad con Palestina. Acompañada de otros dirigentes de Podemos, Belarra participó en las protestas propalestinas durante el paso de la Vuelta, específicamente a la altura de Cercedilla, donde se registraron bloqueos a la carrera.
La etapa final y protestas previstas en Madrid
La etapa final de la Vuelta Ciclista a España recorrerá este domingo 106 kilómetros por territorio madrileño, con un recorrido que ha sido recortado en 5 kilómetros. La etapa saldrá de Alalpardo y pasará por Algete, San Sebastián de los Reyes y Alcobendas, antes de entrar en Madrid, donde los ciclistas realizarán un circuito cerrado urbano con nueve pasos por meta.
Protestas propalestinas se han convocado a lo largo del recorrido, principalmente en Atocha, Callao y la Ermita de San Antonio de la Florida. Se espera que el mayor número de manifestantes se concentre en Madrid, donde el final de la etapa culminará con la coronación del 'maillot rojo' en Cibeles, frente al Ayuntamiento de Madrid, a partir de las 20:30 horas.
Despliegue de seguridad en Madrid
Para hacer frente a las protestas, la Comunidad de Madrid ha preparado un dispositivo de seguridad reforzado con 2.300 efectivos, incluidos 1.100 policías nacionales, 400 guardias civiles, y 800 policías municipales. Además, habrá presencia de agentes de movilidad y un dispositivo de Samur-Protección Civil.
Reacciones políticas y protestas en Madrid
Las protestas han tenido una gran carga política, con formaciones como Más Madrid y Podemos llamando a la participación en las protestas contra el "genocidio" en Gaza, mientras que el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha mostrado su preocupación por los posibles actos violentos. En respuesta, el PSOE y Más Madrid han continuado sus manifestaciones de solidaridad con el pueblo palestino, como se vio en la colocación de una bandera palestina en el Edificio de Grupos Municipales en la calle Mayor. La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha criticado que los ciclistas lleguen "rodeados de violentos" y ha señalado que se está "destrozando la imagen de España ante el mundo".