La líder María Corina Machado aseguró que la oposición logró el 70% de votos en las elecciones: “La victoria es abrumadora”. Nicolás Maduro, sin embargo, se atribuyó el triunfo pasada la madrugada. Lo hizo ante el escepticismo de los principales políticos del mundo y una oposición que denuncia fraude.
¿Cuáles son los ejes claves de la maniobra fraudulenta del chavismo?
Primero, la cooptación del Consejo Nacional Electoral (CNE) venezolano. Maduro anticipó en la mañana del domingo que solo respetaría los resultados exhibidos en "los boletines oficiales" del CNE. Maduro y otros mandatarios chavistas, mostraron especial énfasis en la resolución que adopte el CNE.
Pasada la medianoche, el CNE dio ganador a Maduro sin mostrar actas ni desglose del resultado. El Consejo es el responsable de la transparencia de los procesos electorales y referendarios de Venezuela.
El organismo tiene rango constitucional, está compuesto de cinco miembros y si bien es teóricamente autónomo, pero el chavismo nunca ha estado en minoría en el consejo desde la implementación del mismo en 1999.
Para estas elecciones, el directorio del CNE está tres a dos a favor del oficialismo. Las resoluciones del consejo en los últimos tiempos han favorecido al Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV). Le permitieron apoyarse en los fondos públicos, tener presencia masiva en los medios, además de determinar la división de los circuitos electorales, la duración de la campaña y la fecha de las elecciones.
¿Quién controla el Consejo Nacional Electoral?
El CNE es presidido por Elvis Amoroso, abogado y militante chavista desde los años 90. Fue uno de los fundadores del PSUV, es un hombre de confianza de Maduro y estuvo vinculado a la inhabilitación de María Corina Machado. Fue el encargado de dar los polémicos resultados en favor de Maduro.
Su vicepresidente es Carlos Quintero, un militar que fue uno de los creadores del consejo. Es el encargado de la parte logística de la institución, mientras que Amoroso es el vocero. Rosalba Gil Pacheco, afín al PSUV, es una abogada que preside la Comisión de Registro Civil y Electoral del organismo y es parte de la Comisión de Participación Política y Financiamiento. Ellos tres representan la mayoría que le alcanza a Maduro para manejar el CNE.
Sobre el fraude en sí, María Corina Machado dijo sobre la madrugada del domingo: “Tenemos más del 40% de las actas. El 100% de las transmitidas por el CNE también las tenemos, y toda esta información coincide con que Edmundo obtuvo 70% de los votos y Maduro el 30%”.
El fraude, paso a paso
En Venezuela, la votación es electrónica con un registro en papel. Las máquinas imprimen un comprobante que el votante depositan una urna. El escrutinio y la verificación de los votos son actos distintos. Lo primero que hace el presidente de la mesa de votación es imprimir el acta con los votos realizados en la máquina y entregar una copia a cada uno de los testigos que representan a los distintos partidos políticos.
Los miembros de mesa firman el acta de escrutinio y posteriormente se hace el envío de los resultados al CNE en Caracas. Luego se hace la verificación de los votos. Esta no se lleva a cabo en todas las mesas electorales, sino en alrededor de 16.000 de las 30.026 que hubo en esta elección presidencial. En este paso, se abren las cajas, se cuentan los votos y estos tienen que coincidir con el acta de escrutinio.
Ahí, todo lo impreso (actas y comprobantes de votos) debe encajar con los datos que aparecen en el CNE. Es clave que el ente comicial desglose los resultados por centro y por mesa para poder verificar el resultado.
Ahí surge el tercer punto. La oposición quiere obtener la totalidad de las actas de los comicios para demostrar que los números la favorecen. La página web del CNE está caída y el detalle de los resultados no aparece. Tampoco está claro si se hizo la verificación de los votos.
