El 30 de septiembre finaliza una protección temporal clave para los deudores de préstamos estudiantiles en Estados Unidos, lo que significa que aquellos que se retrasen o no realicen sus pagos ya no contarán con el amparo que ofrecía esta disposición adoptada hace un año, que forma parte de las medidas tomadas por la administración de Joe Biden para aliviar la carga financiera que generan estos créditos.
Los pagos de deudas estudiantiles fueron retomados en 2023 después de estar suspendidos durante más de tres años por la pandemia de covid-19.
Según un reciente informe de la Oficina de Responsabilidad Gubernamental (GAO), casi 10 millones de deudores se encontraban con pagos vencidos a enero de este año. Esto representa aproximadamente 290.000 millones de dólares en préstamos estudiantiles impagos, indicó Axios.
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Qué impacto tiene el fin de la protección
La finalización de este período de gracia podría tener un impacto significativo en quienes no logren retomar sus pagos a tiempo.
Hasta ahora, la medida había brindado protección contra sanciones como intereses adicionales o daños en el historial crediticio, lo que permitía un respiro temporal para los deudores más afectados. Sin embargo, a partir de octubre, aquellos que no estén al día en sus pagos podrían enfrentar consecuencias financieras mucho más severas.
Los expertos recomiendan a los deudores que evalúen sus opciones, como la posibilidad de refinanciar sus préstamos o inscribirse en planes de pago ajustados a sus ingresos, que pueden ofrecer cuotas más accesibles. Además, es fundamental que los deudores se comuniquen con sus proveedores de servicios de préstamos para evitar caer en incumplimiento y sufrir repercusiones a largo plazo.
Repercusión política
El esfuerzo de Joe Biden por implementar la condonación de préstamos estudiantiles, una de sus promesas de campaña en 2020, ha generado una fuerte controversia en el país.
Los republicanos cuestionan la medida y aseguran que el presidente está transfiriendo el costo de la deuda a los contribuyentes que optaron por no ir a la universidad o que ya pagaron sus estudios. Para muchos, esta medida resulta injusta, ya que consideran que quienes asumieron responsabilidades financieras no deberían ser penalizados por las decisiones de otros, informó CNN.
El conflicto se intensificó luego de que la Corte Suprema bloqueara el año pasado el programa original de condonación de deudas de Biden. A pesar de este fallo, el presidente ha buscado nuevas formas de alivio para los deudores, lo que ha sido visto por sus detractores como un intento de eludir al tribunal.
En marzo de este año, varios estados republicanos presentaron demandas contra la administración Biden, específicamente por el plan de reembolso basado en los ingresos conocido como SAVE (Saving on a Valuable Education). Este plan, que se implementó el año pasado, ofrece condiciones muy favorables para los deudores de bajos ingresos.
Biden prometió "no dejar nunca de trabajar para que la educación superior sea accesible", pese a la resistencia de los republicanos.
El mandatario ha cancelado más deudas estudiantiles que cualquier otro presidente, utilizando programas existentes. Su administración ha facilitado la condonación para grupos como trabajadores del sector público, discapacitados y víctimas de fraudes por universidades con fines de lucro.
Hasta el momento, unas 4,8 millones de personas pudieron beneficiarse de la cancelación de deudas estudiantiles del gobierno del demócrata, por 169.000 millones de dólares.
El impacto en la campaña
En medio de la campaña para las elecciones de noviembre, la vicepresidenta Kamala Harris defendió el plan de Biden de condonar las deudas a millones de personas y dijo que se imagina un futuro en el que los funcionarios públicos, como los profesores, no tengan que "luchar con la carga de la deuda de los préstamos estudiantiles".
Por su parte, el republicano Donald Trump elogió el año pasado la decisión de la Corte Suprema de bloquear el programa de condonación de deuda y dijo que habría sido "muy injusto para los millones y millones de personas que han pagado su deuda con esfuerzo".
A la vez, durante el debate del 10 de septiembre, Trump comparó la promesa de Harris de proteger el derecho al aborto con las que hicieron los demócratas sobre la cancelación de la deuda estudiantil. "Es sólo palabrería", dijo el ex presidente. "¿Saben a qué me recuerda? Cuando dijeron que iban a acabar con los préstamos estudiantiles y terminó siendo una catástrofe total", apuntó.
