¿Es Facebook apto para niños?

Expertos de Uruguay y el mundo opinan ante la posibilidad de que la red social de Mark Zuckerberg lance una versión para niños menores de 13 años

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06 de junio de 2012 a las 14:50

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Ya están ahí

La barrera de la edad es fácil de romper en las redes, donde introducir una fecha de nacimiento falsa es tan simple como utilizar una cuenta alternativa, muchas veces la de los propios padres.

Ahora, parece que Facebook intentará zurcir este hueco en su lista de términos y condiciones, y trabaja en una tecnología que permita el acceso de menores de 13 años, el cual está vedado hasta el momento.

Ante la posibilidad de la luz verde por parte de la red social, padres y especialistas levantan la mano a favor o en contra.

El punto de partida del debate es un hecho innegable: muchos niños emplean el sitio a pesar de su edad, a veces hasta con el consentimiento de sus padres.

El Reporte de Consumo 2011 de la organización sin fines de lucro Consumer Reports informa que 7,5 millones menores de 13 años usan Facebook. Además, detalla que los padres de casi un tercio de los niños de 11 años y más de la mitad de los de 12 lo saben. Entonces, regular un fenómeno que ya está instalado parece ser la mejor opción.

Por su parte, la periodista Marry Magid escribió en el sitio de la revista Forbes que, guste o no, “millones de niños usan Facebook” y “no parece haber una forma universalmente efectiva de sacarlos de allí”. Por eso, dice estar de acuerdo con poner en marcha una estrategia segura y privada “que les permita interactuar con amigos y familiares verificados sin tener que mentir sobre la edad”.

Pero otros prefieren tomarlo con pinzas. Si bien el psicólogo Roberto Balaguer coincidió en que los niños debutan en la red social cada vez más temprano, entre los 8 y los 9 años, explicó que se trata de un margen de edad especial, ya que es cuando comienza la socialización.
Existen dos ámbitos para la socialización: el material y el digital, y comparten un tronco común", explicó Balaguer

Por lo que el control que los padres puedan ejercer sobre el uso que los niños hacen de Facebook es una razón “entendible”, pero no la única que justifique este cambio.

“Hay una cosa clara, y es que existen dos ámbitos para la socialización: el material y el digital”, dijo Balaguer. Y aclaró que aunque ambos tienen un “tronco común” son distintos en los manejos que se hacen de uno y de otro.

Al respecto, Michelle Maltais, periodista del diario Los Ángeles Times, dijo estar convencida de que Facebook no es un lugar para los más chicos. Para Maltais la red es un lugar donde “amigo” se ha convertido en un verbo, en “algo que se hace” y no “alguien que eres para otra persona”. Como madre, afirmó no estar dispuesta a privar a su hijo de la “interacción humana” y de descubrir por sí mismo la esencia de las relaciones interpersonales.

Por otro lado y no menos importante, está el tema de la seguridad: Facebook no es “realmente confiable” y el número de “predadores de niños” podría aumentar, opina Louis Bedigian, también en la web de Forbes. Bedigian se respalda en los números que en 2006 indicaban que uno de cada cinco niños era perseguido por un “predador online”.

De extremos y límites


Según Balaguer, la solución con Facebook debería estar entre los límites que significan permitir la libertad absoluta (que es lo que sucede actualmente, según el psicólogo) o imponer la desconexión total.

El problema radica en que la red social de Mark Zuckerberg se encarga de sacar el niño de una “socialización horizontal”, en la que los pequeños se forman solo con sus padres. En Facebook pasan a estar en contacto con otros pares y adultos. “Eso no es ni bueno ni malo en sí mismo”, explicó Balaguer. Para los niños, es atractivo que se amplíe su lista de contactos, que es lo que en definitiva comienzan a buscar.

Hoy en día la forma en que los padres controlan a sus hijos en Facebook –si es que lo hacen– es a través de la contraseña, o dejándolos usar sus propias cuentas. Esto último resulta paradójico porque son los propios padres los que exponen a sus hijos al contacto con otros adultos, señaló el experto.

Además, muchas veces los padres no advierten que su hijo se está forjando una reputación online de forma inconsciente. El hecho de que exista un control no impide que el niño de 8 o 9 años se cree una personalidad en el mundo digital cuya huella quede de por vida.

El deber ser


Hay quienes proponen que Facebook para niños no tenga anuncios publicitarios y cuente con protección de privacidad extra, que implique que los padres se involucren en el uso de la red social por parte de sus hijos.
Entre la opción de que no estén controlados y esta más reglamentada, esta pareciera ser la mejor”, dijo el psicólogo uruguayo

En un reporte del periódico The Wall Street Journal se afirma que fuentes anónimas cercanas a Facebook aseguraron que los mecanismos que se están probando incluyen conectar las cuentas de los niños con las de sus padres, entre otros controles que permitirán a los padres decidir a quién pueden agregar como amigos y qué aplicaciones usar.

Para Balaguer, la clave está en garantizar, en primera instancia, que efectivamente todos sean niños. También en decidir si los padres van a participar y, si lo hacen, de qué manera. Por otro lado, destacó la importancia de que los contenidos accesibles desde la plataforma sean buenos.

Aún así, el psicólogo dijo reconocer la posible “semilla del fracaso”. Y es que para ciertas edades el control puede llegara a ser aburrido: “A diferencia de lo que hace un navegador seguro, que funciona con niños que no han salido al mundo a socializar, los chicos de cierta edad van a buscar ampliar sus vínculos”.

El experto sostuvo que “entre la opción de que no estén controlados y esta, esta pareciera ser la mejor”. En cambio, el mensaje final de la periodista de Los Ángeles Times sobre la red que ya llega a 900 millones de personas en todo el mundo fue: “Gracias, Facebook, pero no, gracias”.




Bullying cibernético


“¿Por qué los padres querríamos permitir el acceso a la preciosa psiquis de nuestros hijos en el santuario de nuestras casas, en computadoras y dispositivos móviles?”, ironiza la periodista de Los Ángeles Times, haciendo referencia al fenómeno del bullying o acoso.

Balaguer explicó que cuando se da una situación de bullying en el día a día, esta de inmediato se traslada a internet (ciberbullying), ya que “la red es una pantalla más de lo que sucede en lo cotidiano”.

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