“Si hay una duda sobre la moral de Lacalle (Herrera), yo soy igual a mi viejo y no tengo dudas”

Lacalle Pou señaló que la conducta de algunos jerarcas de ese gobierno que fueron procesados por la justicia fue "indefendible" pero, sin embargo, defendió la actuación de su familia en este caso.

“Yo puedo ser distinto a mi viejo en muchas cosas. Puedo tener un perfil político distinto pero en temas de moral y ética, la fruta cae cerca del árbol. Y con mucho orgullo”, sostuvo y agregó: “Si hay una duda sobre la moral de Lacalle, yo soy igual a mi viejo y no tengo dudas”.

Para el nacionalista, “lamentablemente nadie está vacunado”, en referencia a los casos de corrupción comprobados. “Quien comete este tipo de actos al primero que traiciona es al que lo elige, al que le deposita la confianza. Con el diario del lunes a veces es más fácil analizar las cosas, trato de no juzgar tan firmemente estos elementos pero sí debo hacerlo porque te estás refiriendo a mi padre entonces tengo que tratar de despojarme de temas familiares, sanguíneos y del amor filial”, sostuvo.

En 1996 luego del procesamiento por abuso de funciones del exdirector del Banco de Seguros del Estado (BSE), Julio Grenno, y del exasesor presidencial Daniel Cambón el Partido Nacional los expulsó de sus filas. Asimismo, le suspendió los derechos partidarios al exministro de Economía, Enrique Braga, quien había sido procesado por el mismo delito pero, tras su muerte, fue absuelto por la justicia. “Esos casos si son detectados a tiempo hay que cortar rápidamente”, dijo Lacalle Pou y contó que no recordaba “momentos más tristes y dolorosos”.

En tanto, el candidato blanco defendió a su padre y madre y dijo que el patrimonio de los Pou aumentó en un millón de dólares porque en 1995 murió su abuelo, Alejandro, y cobraron una herencia.  “No hay una transferencia bancaria, un billete abajo del colchón”, afirmó. También señaló que la carta en la que se hablaba de la participación de su madre en la operación del Banco Pan de Azúcar nunca fue recibida por nadie.