Apelan a hospital militar y policial para cirugías retrasadas por paro

El paro del Sindicato Anestésico Quirúrgico (SAQ) previsto por cinco días desde el próximo lunes para el sector público y privado, preocupa a la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE), especialmente por la lista de espera que se genera a raíz de que se deben cancelar las cirugías programadas, algo que ya se dio a fines de octubre con un paro de tres días que postergó cientos de cirugías, según el gremio. La presidenta de ASSE, Susana Muñiz, dijo el martes en la Comisión de Presupuesto del Senado que se están buscando estrategias para evitar que la atención se vea afectada.

Una alternativa que se maneja es solicitar asistencia al hospital Militar y al Policial. "En el pasado, por ejemplo, los paros del sector anestésico quirúrgico no afectaron tanto la sanidad militar ni la sanidad policial. En consecuencia, es casi seguro que los contactaremos para que nos ayuden a resolver estas dificultades", dijo Muñiz a los senadores.

Según manifestó la jerarca, la idea es que los prestadores públicos y privados complementen los servicios de cirugía para que no haya retrasos, pero "sobre todo dentro de los públicos". Por ese motivo es que se apelará al Policial y Militar.

Otra opción que también se maneja es jerarquizar determinadas cirugías. El hospital Maciel, por ejemplo, tiene previsto destinar una semana entera de diciembre a atender a aquellos pacientes que tenían una operación programada para alguno de los días de paro.

El director de ese centro, Álvaro Villar, explicó a El Observador que en el Maciel trabajan con un cronograma en el cual determinadas salas se destinan a diferentes especialidades.

Para esa semana de diciembre -que aún no está totalmente definido cuál será- se priorizarán las cirugías generales, que son las que más se afectan por los paros de los anestesistas y cirujanos. Villar dijo que también se prevé extender las jornadas. Para programar esa semana, la dirección trabaja con el servicio de cirugía y anestesia del hospital. En el Pereira Rossell, por su parte, tienen cubiertas las guardias para la semana del paro, aseguró a El Observador el director general, Federico Eguren.

Los anestésico-quirúrgicos reclaman participar de las negociaciones salariales, algo que por ley le corresponde al Sindicato Médico del Uruguay (SMU), por el que el SAQ dice no sentirse representado.

El gobierno envió una propuesta al gremio de anestesistas y cirujanos (ver apunte) para intentar que desactiven la medida pero todavía no fue analizada por sus dirigentes.

El ministro de Trabajo, Ernesto Murro, se mostró molesto por el paro y dijo a la prensa que le parece "absolutamente inexplicable e inentendible" que se demoren "algunos cientos de operaciones" que lleva a una "situación riesgosa para la población" por un conflicto por la representatividad en los Consejos de Salarios. "La propuesta del gobierno apunta a darle la participación que de acuerdo a la normativa entendemos que corresponde a la SAQ. De ninguna manera es aceptable que se ponga de rehén a un país donde por un problema sindical interno se someta a la población al riesgo de que se posterguen centenares de operaciones. En mi opinión este es un conflicto exagerado", sostuvo Murro. El gobierno maneja la posibilidad de decretar la esencialidad como una alternativa, aunque no asegura que lo haga.