Con un café perdido del que nadie se percató, Starbucks revolucionó a Game of Thrones

Hasta a la serie más cara y más popular de la historia le puede pasar. Basta que el encargado de mantener la continuidad entre las escenas haya tenido un mal día, y que al resto de quienes supervisan la realización se les pase por alto, para que suceda. De todas formas, resulta al menos increíble que nadie en la inmensidad de la producción de Game of Thrones se haya percatado de que en medio de una mesa medieval, llena de platos y comidas medievales, con hombres y mujeres medievales festejando una victoria a fuerza de espadas y acero valyrio, alguien había olvidado un vaso de Starbucks.

Pero pasó: el anacrónico elemento cafetero se metió en una de las escenas del último capítulo de la serie –titulado The Last of the Starks– y apareció en medio de los festejos pos batalla de Invernalia para molestar a los seguidores más quejosos. 

Con la rapidez con la que proliferan las cosas en las redes sociales, la imagen con el recipiente de café frente a una despistada Daenerys Targaryen y un beodo Jon Snow se replicó infinidad de veces, llegó a los portales de noticias del espectáculo y, claro, generó una catarata de memes alusivos.

Más allá de este desliz, el capítulo tuvo grandes momentos, y algunos de ellos se pueden repasar en las fotos oficiales divulgadas por HBO.