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Eutanasia: Sturla no llamará "muerte natural" a lo que "es un asesinato"
El arzobispo de Montevideo, Daniel Sturla, cuestionó fuertemente el proyecto que pretende regularizar y legalizar la eutanasia, a la que directamente se refirió como un "asesinato", al tiempo que llamó a evitar la aprobación de una ley que terminará "avergonzando" al Poder Legislativo.
El cardenal aludió en su audición semanal en Radio Oriental a los cinco informes que distintas reparticiones del Ministerio de Salud Pública (MSP) realizaron sobre el tema y que incluyen duros conceptos hacia la iniciativa de legalización. Especialmente al elaborado por el Programa de Cuidados Paliativos de esa cartera, que utilizó términos como "obscenidad" y "calamidad" para señalar la intención de legislar sobre el tema.
Sturla se refirió allí específicamente al diputado colorado Ope Pasquet, uno de los autores del proyecto, al recordar que en su momento fue un "gran propulsor" de la despenalización del aborto y que ahora está detrás de una ley que "atenta" contra la vida humana. "Ya se atentó contra la vida humana en su concepción", lamentó el arzobispo al hacer referencia sobre la legalización de la interrupción voluntaria del embarazo. Ahora, dijo, se trata de ir contra la vida humana al momento de su muerte natural. Sturla lamentó que, al mismo tiempo, esté "encajonado" en el Parlamento el proyecto de ley referente a los cuidados paliativos.
"Se dice que la persona es más libre porque puede pedir que la maten", ironizó el cardenal al referirse a los defensores de la legalización de la eutanasia. Palabras, dijo, que solo tratan de "suavizar" el tema. Sin embargo, según su visión, una persona que deba llegar a esa situación no es realmente libre. Lo que más necesita en esos momentos, dijo, es cariño, cuidado y contención.
Sturla llamó a valorar el don de la vida. "Es lo más importante que tenemos. No debemos crear una mentalidad de muerte", indicó. El jefe de la Iglesia Católica uruguaya ahondó en sus críticas al proyecto, al promover el suicidio asistido en un país que exhibe, justamente, una altísima de tasa de autoeliminaciones. El cardenal aventuró que, si se aprueba ley, las personas mayores "van a terminar sintiendo que son una carga para los suyos".
"Nos enfrentamos nuevamente a la defensa de la vida humana", expresó el arzobispo, que llamó la atención sobre el "apuro" de blancos y frenteamplistas en votar el proyecto. "No puedo dejar de pensar en que, tras estos apuros, se esconde la intención de alejar este tema político de las elecciones nacionales", aseguró. Se quiere, dijo, evitar eventuales perjuicios electorales.
En el cierre de su audición, Sturla aclaró que no caería en eufemismos en relación a la eutanasia. No llamará, dijo, "muerte natural" a lo que a su juicio "es un asesinato"
"Defendemos la vida desde su concepción hasta la muerte natural", afirmó el cardenal, quien pidió que el Parlamento "asuma su responsabilidad" y, antes de votar el proyecto, acceda a escuchar a los que se oponen a una ley que "avergonzará a nuestra legislación nacional".
