Familiares de Maldonado: investigación debe seguir

A diferencia del entierro, el velatorio fue abierto al público, aunque los familiares pidieron a los asistentes que no ingresaran con cámaras fotográficas ni celulares para garantizar la intimidad.

Los restos del tatuador fueron llevados hasta el cementerio Parque Paraíso para el responso e inhumación.

Por otra parte, los familiares y representantes de organismos de derechos humanos pidieron justicia cuando se enteraron lo ocurrido en Villa Mascardi mientras velaban al joven artesano.

"No lo creo, ¿es una joda?", manifestó a La Nación una joven mendocina que había colgado una bandera mapuche en la esquina de la cochería donde velaban a Maldonado. Hasta el lugar se acercaron decenas de personas, entre allegados, ciudadanos, referentes sociales, "mochileros" con banderas indígenas, y hasta autoridades políticas.

El hermano de Maldonado, Sergio, había insistido el viernes en que estaba todo el mundo bienvenido a acompañarlos en este acto, pero "sin banderas políticas" para tratar de evitar la politización del caso del artesano de 28 años, que ha mantenido en vilo a la sociedad argentina desde que había sido visto con vida por última vez el pasado 1° de agosto.

Tras varias semanas de búsqueda angustiosa, el cuerpo sin vida del joven fue hallado el 17 de octubre en el sureño río Chubut.

El pasado viernes culminaron las pericias ordenadas por el juez Gustavo Lleral que establecieron que el joven falleció por "ahogamiento por sumersión", en un cuadro "ayudado por hipotermia". Después de casi cuatro meses, la familia pudo despedir a Maldonado, aunque sostienen que no abandonarán la causa hasta saber qué fue lo que pasó.