Game of Thrones: la radiografía de un guión

"¿Qué tienen en común las historias de Kill Bill, El secreto de sus ojos y la vida de Arya Stark?", preguntó el guionista y docente uruguayo Alan Goldman a su auditorio. "La venganza", respondió una de las presentes con seguridad. "Correcto", alentó Goldman. Enseguida repreguntó: "¿Y qué tienen en común Zodíaco, CSI, El almohadón de plumas y la historia de la madre de Jon Snow?". El silencio se extendió por unos segundos en un salón ubicado en el segundo piso del Centro Cultural de España (CCE). "Un misterio a resolver", aventuró a responder un joven. Goldman le dio la razón.

La semana pasada el guionista brindó una charla abierta en el CCE sobre el juego de tramas en la exitosa serie de HBO, Game of Thrones. Según explicó Goldman, toda la historia de G.R. R. Martin está construida en base a tramas que inconscientemente todos los occidentales tienen incorporadas, un conocimiento compartido que trasciende a los fanáticos de la serie.

Desde que los cavernícolas pintaban sobre piedra y los chamanes reunían a sus tribus en torno al fuego, las historias han sido un formato recurrente que los seres humanos han adoptado para entretener, transmitir conocimiento, educar, controlar a otros y hasta solventar esa necesidad innata de querer conservar experiencias efímeras y aferrarse a ellas.

Según analizó Goldman, las grandes fuentes de inspiración de las películas, series y novelas actuales siguen siendo la Biblia y los mitos grecorromanos. "La Biblia es medio un juego de tronos en algún punto", consideró.

Durante milenios los seres humanos, primero de manera oral y mucho después de forma escrita, han ido definiendo y fosilizando ciertas formas y paradigmas narrativos que son comunes a toda la humanidad. "No son patrimonio de ninguna cultura en particular sino que todas las sociedades con sus respectivas tradiciones han ido llevando estos mismos formatos en sus historias", manifestó el guionista y comparó las estructuras narrativas con las arquitectónicas. "Si un uruguayo viaja a China y no sabe el idioma no va a entender ni la mitad de las cosas que se digan o hagan en esa cultura; pero si va a reconocer una casa, una oficina, un shopping o un hospital porque son formas iguales allá que acá". Goldman cree que así como sucede con la narrativa y la arquitectura lo mismo sucede con la ropa y la narrativa. Una persona no va a una tienda y le pide a un vendedor o diseñador algo con lo que taparse las piernas sino que pide un pantalón. Puede haber millones de diseños y telas para un pantalón dependiendo del tiempo y el lugar, pero la forma de esta prenda es la misma desde hace miles de años.

La observación de Goldman se materializa en Games of Thrones con cuatro tramas que corren en paralelo dentro de una misma historia: la lucha de poder, la venganza, el amor y los cambios. ¿El hilo conductor y el factor común de estas tramas? Los propios personajes.

A lo largo de la serie la gran mayoría de los personajes compiten por un mismo objeto: el trono de hierro. Y el trono es sinónimo de poder. O sea que lo que motiva y mueve a los personajes a actuar es precisamente alcanzar ese poder o estar lo más cerca posible de él. "Game of Thrones es una historia de poder y de política en su sentido más esencial", describió Goldman. Cersei Lannister, Jon Snow, Daenerys Targaryen, Meñique, Tyrion, entre otros; todos participan del juego de tronos y luchan por el poder. G.R.R. Martin ha dicho en varias entrevistas que sacó su inspiración de la historia medieval europea. Mucho de lo que suceden en los Siete Reinos está basado en la Guerra de las Rosas que enfrentó a los nobles de la casa York contra los nobles de la Casa Lancaster (¿alguien dijo Stark y Lannister?). "La lucha de poder es algo muy básico de la humanidad y que, más o menos sangrienta, nos sigue rodeando. Es cuestión de abrir un sitio de noticias para darse cuenta".

Arya Stark es el personaje que mejor resume una trama de venganza. Pero la serie está minada de personajes cuyo mayor motor es este oscuro sentimiento y eso los vuelve sumamente peligrosos dentro de la trama. Cersei, por ejemplo, ya lo demostró al final de la sexta temporada cuando redujo parte de la ciudad a cenizas; y ahora que ya perdió a sus hijos, su cable a tierra, y tiene el poder nada detendrá su maldad y su locura. Para que haya venganza tiene que ocurrir una justicia real o imaginaria, una ofensa a la que un personaje no pueda responder en el momento o que las instituciones encargadas de garantizar la justicia tampoco respondan. "Arya es una niña cuando los Lannister matan a su familia y no puede ajusticiarlos por mano propia, a su vez al vivir en ese sistema anárquico ella siente que nadie le va a dar justicia, sobre todo considerando que los que están en el poder son los que matan a su padre", analizó Goldman.

Jon Snow con Ygirtte, Sam con Gilly, Cersei con Jaime, Loras con Renly, o Tyrion con Shae. Historias de amor que se atraviesan en la trama de Game of Thrones y que alimentan cada uno de los capítulos de la serie. Tener una historia de amor no quiere decir que dos personajes estén juntos, "eso es una historia de amor aburridísima", opinó el guionista uruguayo. Lo que se entiende por una historia de amor es siempre dos personajes que quieren estar juntos pero que por algún motivo no pueden. "Por lo general son personajes que tiene una química intensa y que el espectador quiere que estén juntos pero por diferentes motivos la trama los mantiene separados", explicó Goldman. En GOT la mayoría de estas historias de amor son prohibidas, enamorados que en primer lugar nunca debieron estar juntos ya sea por normas religiosas, incesto, clases sociales u origen de sus familias. Son prohibiciones de carácter social que tienden a lo trágico, o sea el clásico formato Romeo & Julieta.

Finalmente, la trama de los cambios se basa en el ascenso y caída de los personajes. De cómo una figura importante dentro de la historia llega a convertirse en quien realmente es. En GOT la forma más sencilla de visualizarlo es con Daenerys, que pasa de ser una sometida de su hermano a convertirse en la Madre de Dragones.