Golpes, pedradas y manoseo: el ataque al liceo 51 por el que los docentes ocuparon

Los funcionarios y docentes escribieron en una carta que los agresores “se instalaron en la puerta, manosearon estudiantes, golpearon a quienes las defendieron, apedrearon el liceo” y luego amenazaron a quienes intervinieron para detener el ataque “con fierros y armas blancas”. Como saldo de las agresiones, un estudiante quedó lastimado con un corte en su cabeza, aunque no reviste gravedad.

La medida se tomó por tiempo indeterminado, hasta que las autoridades brinden garantías de seguridad y den una respuesta a carencias estructurales del liceo, como la falta de personal para conformar un equipo multidisciplinario, que se considera especialmente necesario para atender problemáticas sociales muy presente en ese barrio, dijo Javier iglesias, dirigente de la Federación Nacional de Profesores (Fenapes).

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También señalaron que el equipo de dirección se encuentra incompleto, que faltan funcionarios de servicio y que la superpoblación del liceo exige la construcción de otro salón.“Es un liceo que estuvo ocupado a comienzos de año, porque tiene varios problemas: está en una zona complicada y a eso se le suma la falta de recursos, lo que hace que las problemáticas (sociales) se noten aún más”, dijo Iglesias a El Observador.

“Si bien en el barrio siempre tuvimos situaciones de este estilo, este año se incrementaron mucho los robos en la puerta y el ingreso de personas ajenas a la institución”, explicó, por su parte, la carta de los profesores, y agregó luego que las respuestas, tanto de la policía como del Consejo Directivo Central (Codicen), han estado “lejos” de resultar satisfactorias.

“Casi nos insultan  –contaron –, desde plantear que estamos dando manija y (que) esto es una sensación térmica, hasta que los docentes realicemos arrestos ciudadanos a personas menores de edad para retenerlos” mientras llega la policía. Y afirmaron: “Como educadores, nos negamos rotundamente a actuar de esa forma, nuestro rol es pedagógico y no policial, y exigimos que estas situaciones se resuelvan por parte de los organismos competentes, desde el Ministerio del Interior hasta el INAU”.

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Esta tarde, el sindicato tiene pautada una reunión con las autoridades del Codicen, en la que también  transmitirán, entre otros puntos, que “las trepadas a los techos, las apedreadas (sic) a los salones y los hurtos a los estudiantes se han convertido en el escenario cotidiano” de la institución.

Asimismo, los profesores pedirán que se invierta en seguridad privada, servicio de portería, cámaras de seguridad en la vereda y en una mejor la iluminación.