Lo que se sabe del accidente del helicóptero que llevaba las vacunas de Pfizer

Según aseguró el comandante en jefe de la Fuerza Aérea, Luis Heber De León, el helicóptero tuvo una falla y debió iniciar maniobras de aterrizaje. Eso fue luego de que el piloto sintiera un ruido en la nave y por eso decidió bajar en un campo.

El piloto controló la aeronave y todos quienes viajaban están fuera de peligro. Una vez que aterrizó, los cuatro tripulantes lograron salir y el helicóptero enseguida se prendió fuego. 

El coronel al mando tenía 3.400 horas de vuelo, voló para Naciones Unidas y su experiencia fue determinante para poder aterrizar el helicóptero antes de que se incendiara, aseguró el jefe de la Fuerza Aérea. 

El helicóptero era de 1980, tenía 8.640 horas de vuelo, y estaba en buenas condiciones.

Las condiciones meteorológicas estaban bien, según estimaron durante la conferencia. El factor material es la segunda parte de la investigación, lo que implica que se va a reportar a la empresa fabricante del helicóptero que había volado por última vez la noche anterior. 

La Fuerza Aérea informó que mantendrá el reparto de dosis de la misma forma pese a que se perdió uno de los medios de transporte. Los helicópteros van a seguir llevando las vacunas a todos el país en condiciones seguras, se insistió. Hasta el momento, las autoridades afirmaron que los operativos de traslado han funcionado bien y que ir por aire permite llegar más rápido que hacerlo por tierra. Hoy llevaron vacunas a Durazno, Rivera, Artigas, Colonia, Salto y Soriano. Por tierra, fueron a Tacuarembó, Cerro Largo y Treinta y Tres. 

Los helicópteros hacen habitualmente tres rutas para transportar vacunas: al centro, al litoral y al este. Hoy se usaron cinco helicópteros, algunos fueron a Durazno y de ahí salieron para el litoral con las vacunas. No siempre necesitan volver a Montevideo. En el caso del vuelo que se accidentó, solo iba a Rocha y luego volvía para la capital. Eso explica la poca cantidad de dosis que transportaba.