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Los análisis de Sanguinetti y de Manini Ríos a la hora de “pasar raya” al año
Cada uno a su estilo, con puntos de contactos pero también con diferentes enfoques, Julio María Sanguinetti y Guido Manini Ríos, los líderes de los partidos socios principales del oficialismo en la coalición de gobierno, realizaron su balance en el cierre de año.
En una columna difundida en Correo de los Viernes Sanguinetti sostuvo que, a los ojos de un mundo convulsionado por la reciente pandemia y la invasión rusa a Ucrania, Uruguay luce como una suerte de isla de estabilidad.
El expresidente “pasó raya” al año y destacó como un primer punto positivo la ratificación mediante plebiscito de la ley de Urgente Consideración (LUC) el pasado 27 de marzo que, a su juicio, confirmó claramente a la mayoría electoral obtenida por la coalición de gobierno en noviembre de 2019.
“Hoy, con las perspectiva que dan estos meses, muestra el valor tanto de esa norma como de la falencia de una oposición radicalizada que se asentó en falsedades” afirmó el expresidente en relación a la campaña que desarrolló el Frente Amplio para derogar la ley. “Era todo tan falso como lo que se decía de la privatización de la educación”, que ubicó “en el territorio de la verdadera ridiculez”.
En el plano económico puso el haber en que el país mantiene una inflación controlada en una economía que cerrará el año con un alza de cerca del 5%, bajo el influjo de un crecimiento notable de las exportaciones pese al atraso bancario.
“Este es un punto importante para el año que viene”, advirtió el secretario general del Partido Colorado. Agregó que, mientras el dólar se fortalece en la región no es sostenible que siga bajando en Uruguay. “La experiencia nos dice que si las tasas altas en pesos sirvieron para moderar la inflación, hoy nos pueden llevar a una peligrosa distorsión”, indicó.
Sanguinetti destacó a su vez la recuperación del mercado laboral, la baja del desempleo y un “proceso afirmativo” de recuperación del salario real que, dijo, será confirmado por las cifras de cierre del año.
En su lista incluyó el “esfuerzo enorme” que hizo el gobierno vía Rendición de Cuentas con más de US$ 1.500 millones de incremento destinado sobre todo al área social: Centros CAIF, asignaciones familiares, asentamientos y una serie de planes de alimentación que “si algo dejaron en evidencia es que el Estado actuó con infinita más responsabilidad que la famosas ‘ollas populares’, infectadas de un proselitismo inmoral”.
Sanguinetti advirtió también que el año termina con “turbulencias mediáticas” con las que la oposición logró transformar en políticos “fenómenos simplemente delictivos”. Allí mencionó los casos de la “banda de coimeros” que falsificaban pasaportes para ciudadanos rusos que - recordó - venía actuando desde el gobierno anterior y que ahora había sumado al jefe de la custodia presidencial.
A ese escenario, dijo, se suma la expedición legítima de un pasaporte a un “ciudadano oscuro”, en referencia al narcotraficante Sebastián Marset. Sanguinetti cuestionó a la oposición por intentar armar un “culebrón institucional” cuando, señaló, quedó demostrado que la Justicia pudo actuar en forma independiente y que la investigación de los servicios del Estado no tuvo límites.
“La democracia uruguaya está firme y sólida”, destacó. “El país crece y basta mirar a los niveles de consumo de este fin de año para advertir que la mayor actividad económica proyecta sus beneficiosos efectos en la vida de la familia”. Sanguinetti reconoció que persisten sectores marginados e “islotes de pobreza”, pero apuntó que el Estado no está ausente.
“No nos dejemos arrastrar por microclimas episódicos”, pidió. “Cuando los vientos nublados arrecian, levantemos la vista, observemos el panorama y comprobaremos la salud de nuestra República”, aseguró. La imagen, dijo, será la de un país en marcha.
"Fieles a sus principios"
Manini en cambio optó por difundir su balance a través de las redes sociales en una presentación grabada en la Biblioteca del Palacio Legislativo. Su balance coincidió con el de Sanguinetti en destacar en primer lugar la ratificación de la LUC, aunque su lista luego siguió por aspectos estrictamente partidarios.
El general retirado mencionó el reciente congreso en el que Cabildo Abierto habilitó la creación de corrientes internas, o el congreso de jóvenes, a los que considera necesarios para “darle fuerza y dinámica a un partido que necesita de ellos para asegurar su continuidad”.
Manini habló de algunas iniciativas que los cabildantes, “fieles a sus principios”, han planteado en este año parlamentario. En particular, insistió en el proyecto que promueve un mecanismo para reestructurar la deuda de las personas físicas. Allí recordó a las “miles y miles” de personas que están en serios problemas, “víctimas de leyes que permiten una usura desmedida, amparada en políticas y criterios equivocados”.
“Estamos convencidos de que el sistema político debe estar a la altura y encontrar una solución”, exigió. “Cabildo Abierto va a bregar por esa solución llegue”. Manini dejó en claro que si el proyecto de ley no se aprueba, iniciará una campaña de firmas para convocar una consulta popular que defina el tema
El senador dijo que su partido se proyecta hacia el futuro y es consciente de que constituye una esperanza para miles de uruguayos, a la vez que representa al voz de muchos que no la tienen.
En su saludo por Navidad, pidió que “el recuerdo del nacimiento de aquel que cambio la historia de la humanidad” sea un motivo de reflexión y de valoración de la familia como la institución fundamental para el ser humano.
