Marcelo Balcedo deberá pagar multa de US$ 300 mil por tener "12 tajamares irregulares"

La resolución fue emitida este jueves, lleva la firma del ministro Adrián Peña, y señala que la Dirección Nacional de Aguas (Dinagua) constató la existencia de “12 tajamares sin regularizar que captan aguas públicas y no poseen derechos de uso vigentes”, de acuerdo con el documento al que accedió El Observador. 

El Ministerio intimó a Balcedo a depositar el dinero en una cuenta de Ambiente en menos de diez días hábiles. “Al realizar el depósito o transferencia, se deberá identificar en el asunto con número de expediente o nombre de la persona a la que corresponde realizar pago”, dice el texto. Además, expresa que si no cumple con el pago, Ambiente quedará habilitado a iniciar las “acciones judiciales correspondientes” para hacer efectivo el cobro.

Balcedo está en prisión domiciliaria en "El Gran Chaparral" por delitos de lavado de activos, contrabando y tráfico de armas. La condena fue emitida mediante un proceso abreviado y se extenderá hasta 2024. Su esposa Paola Fiege también cumple la condena en la chacra por asistencia al lavado.

La chacra fue comprada en 2011. Pueden salir de la casa pero a las 10 de la noche tiene que estar de regreso. La policía puede llegar en forma aleatoria a controlar que cumplan con la medida. 

Una vez que se cumpla esa sanción, el empresario será extraditado a Argentina, donde es investigado por desviación de fondos pertenecientes al Sindicato de Obreros y Empleados de la Educación y la Minoridad (Soeme).

A su vez, Balcedo denunció al Estado uruguayo por US$ 22 millones por haber frustrado un negocio con un avión estadounidense. La demanda responde a lo sucedido con el avión Gulfstream G-IV –que Balcedo tenía bajo un contrato de leasing–, que fue incautado por orden judicial en enero de 2018, cuando estaba cerca de despegar del Aeropuerto de Carrasco. La aeronave fue devuelta a la empresa propietaria luego de un año retenida.

"Lo que tenía Balcedo era una sociedad que arrendaba ese avión y lo explotaba. Es el mismo leasing de autos; es un arrendamiento de uso, con el cual, cuando lo terminás de pagar, tenés dos opciones: o te lo quedás y lo pasás a tu nombre o lo podés devolver y hacer otro leasing", según explicó en ese momento su abogado Adriana Falco a El Observador.