El Ministerio de Salud Pública (MSP) informó este martes a través de Twitter que resolvió retomar las consultas presenciales en "todas las especialidades médicas y quirúrgicas", los estudios diagnósticos invasivos y las cirugías de coordinación a partir del 17 de mayo.
De una forma similar a la que planteó el Poder Ejecutivo con el regreso a clases, las autoridades sanitarias dispusieron establecer un "retorno gradual" con un mínimo de dos consultas presenciales por hora.
Las cirugías que no comprometan la atención en los CTI serán obligatorias. En una conferencia de prensa que tuvo lugar en la tarde de este martes, el director general de Salud, Miguel Asqueta, explicó: “Aunque en este momento la ocupación de camas es importante, nos pareció que hay condiciones para volver a alguna forma de asistencia presencial”.
En esa línea y para evitar aglomeraciones en los centros, la cartera dispuso que haya un aforo mínimo de dos pacientes por hora en las intervenciones quirúrgicas básicas. “No va a poder haber la totalidad de las consultas, hay aforo en todas las especialidades”, recordó el jerarca.
La resolución establece además la obligatoriedad de realizar estudios diagnósticos invasivos (fibrocolonoscopía, endoscopía digestiva, cistoscopía, entre otros), cirugías de coordinación ambulatorias, cirugía de día y de coordinación en general, siempre y cuando estas últimas presenten un "bajo riesgo de complicación" para los pacientes. En esos casos, el criterio quedará a estudio de la Dirección Técnica de la Institución.
El MSP le pidió a todos los prestadores de salud que para el 15 de mayo presenten un “plan de normalización” de la atención sanitaria hasta fines de 2021, según dijo el subsecretario de la cartera, José Luis Satdjian. “Esto lo hacemos en el sentido de que debemos progresivamente retornar a la atención presencial”, añadió.
Además, la Junta Nacional de la Salud (Junasa) está recabando información en estas horas para establecer cuál es la demora real de las cirugías que están suspendidas y cuántas.
El pasado 23 de marzo, el ministerio comunicó la suspensión de las cirugías hasta el 30 de abril y aclaró que esa pausa quedaba sujeta a extenderse "en función de la situación epidemiológica".
La medida llegó como consecuencia de la por entonces reciente aparición de la variante P1 del coronavirus y la posible saturación de los CTI, que este lunes alcanzaron su pico de ocupación general con 79,5%, informó la Sociedad Uruguaya de Medicina Intensiva (SUMI).
Pese a estos números, y a que los casos activos crecieron a un ritmo acelerado durante el último mes, la cartera comunicó este martes que no le dará prórroga a la decisión, sino que habrá un regreso escalonado.
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