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Newsletters: qué son, por qué volvieron a ser populares y a cuáles vale la pena suscribirse

Son textos –por lo general con un estilo personal y de temas muy variados– que reparten noticias, cuentan experiencias y hacen recomendaciones

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11 de febrero de 2020 a las 05:02

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En la antigua Roma eran un pedazo de pergamino que se intercambiaban entre colegas, amigos y familiares. No eran cartas. O sí, pero para nadie en particular; las leían todos. Algunos creen que fueron la génesis de los diarios. Eran pequeños boletines de noticias en las que alguien –por lo general un erudito más o menos confiable– volcaba todo lo que había pasado en el último tiempo y creía relevante compartir con el resto. Se escribía una y esa misma se pasaba de mano en mano para que todos los interesados pudieran leerla. Así, nadie que viviera en el pueblo, o formara parte de la comunidad o la ciudad quedaba sin saber qué era lo que había pasado con tal o cual referente, con los mercados, con los guerras, con la filosofía, con la cultura.

Ya en la Edad Media aquel formato pasó a tener un rol más utilitario. Mercaderes y comerciantes comenzaron a generar boletines parecidos, pero para difundir la llegada de nuevos productos. También se publicaban noticias políticas que de una u otra manera podían influir en la actividad económica, como que un enfrentamiento en un pueblo estaba complicando la distribución de alguna materia prima.

Así, con el paso de los siglos, los boletines de noticias mutaron una y mil veces hasta que se transformaron en lo que son hoy: newsletters. Un nombre que al marketing le sienta mejor.

En su esencia, las newsletters siguen siendo las mismas desde su origen. Lo que sin dudas cambió fue el formato, su alcance y el tono de los textos. Ahora, las newsletters se reparten por correo electrónico. Las mandan los medios, las marcas, los comediantes, los escritores, los periodistas y cualquiera que tenga algo para compartir. Solo hace falta alguien del otro lado dispuesto a recibir el mensaje.

Hay varios tipos de newsletters. Pero todas tienen elementos en común: apuntan a un público específico, dan información, consejos, opiniones y hasta pronósticos de ciertos temas. También suelen tener un lenguaje simple, nítido y coloquial. ¿Y qué temas abarcan? Literalmente se podría escribir una sobre cualquier asunto. Las que más abundan son las de noticias en general, pero las que suelen valer la pena en especial son aquellas muy específicas porque sus autores comparten esta particularidad con sus lectores, entonces se genera cierta confidencia.

Ese estilo y lenguaje accesible, la revalorización de la curaduría de contenidos en la era de la sobreabundancia de información y el arraigo de los medios digitales son algunas de las razones por las cuales los analistas aseguran que el formato volvió con tanta fuerza.

Y si bien ya quedó claro que las newsletters son tan viejas como la civilización humana, en esa selva tan caótica como es internet siempre viene bien algún tipo de guía. Por eso El Observador armó una selección bastante aleatoria con algunos de los boletines que andan en la vuelta en español y en inglés y a los que vale la pena, al menos, suscribirse para descubrir.

In her words - The New York Times

Para los que lean inglés, esta es una de las más recientes incorporaciones a la larga lista de newsletters que tiene el diario estadounidense The New York Times. Las editoras y redactoras de la publicación se cansaron de que los hombres protagonizaran la conversación en los boletines informativos. Entonces impulsaron un proyecto que, en el nicho, ya está bastante consolidado. In her words (que se traduce al inglés como En palabras de ella), propone una vez a la semana desarrollar un tema de la actualidad con perspectiva de género. De coberturas que van desde la poca presencia de mujeres en los premios Oscar, hasta un análisis sobre el impacto sexista del algoritmo en internet. Todos los temas que importan, en palabras de ellas.