Los dos días menos de actividad en las industrias frigoríficas –el miércoles 22 por el paro general y el sábado 25 por el feriado nacional– se hicieron sentir en la faena de la última semana, tanto vacuna como ovina.
La Asociación de Consignatarios de Ganado (ACG) tras su reunión semanal, en la que se analiza el mercado y se establecen valores de referencia, señaló que, la baja en la faena marcó un nuevo ajuste en los valores de las principales categorías de ganado gordo, además de observar una notoria disparidad entre las entradas según las plantas.
El Instituto Nacional de Carnes (INAC) informó que, en la semana al 25 de agosto, fueron procesados 36.188 vacunos, siendo 18.609 novillos (51,4% del total) y 16.953 vientres (46,8%).
Minerva-Pul (3.756 cabezas), Las Piedras (3.175) y Minerva-Canelones (2.776) fueron las plantas que más faenaron.
Gustavo Basso, director de Gustavo Basso Negocios Rurales, señaló a El Observador que a la importante caída que tuvo la faena, debe sumarse el hecho que la industria, actualmente, tiene fundamentalmente la atención puesta en el negocio de Cuota 481.
“Las plantas están abocadas a hacer esta faena, que se vuelve más voluminosa en estos momentos para la categoría de novillos y vaquillonas. Lo que es la comercialización de ganados de pasto está sin una gran oferta”, expresó.
La faena de los lanares también sufrió un gran ajuste. En la semana al 25 de agosto, según INAC, ingresaron a planta nada más que 5.704 ovinos: 2.116 capones (37,1% del total), 1.818 ovejas (31,9%), y 1.419 corderos (24,9%).
Las plantas más activas, en este caso, fueron Caltes (2.255 cabezas), Somicar (1.307) y Sidercol (1.295).
Según Basso, esta pronunciada caída en la faena de los ovinos podría explicarse por la reducida demanda y poca fluidez con la que está el principal destino de colocación para esta categoría, Brasil.
El cordero pesado está en el entorno de los US$ 3,35, la oveja entre US$ 3,05 y US$ 3,10 y el capón en el eje de los US$ 3,15.
Gustavo Basso mencionó también que el mercado para el ganado de la reposición continúa firme y con escasa oferta, lo que posibilita que haya una colocación con valores sostenidos, donde, sin lugar a dudas, la incertidumbre que se ha generado en el tema del ternero con destino a la exportación en pie, muestra un mercado que está en proceso de armado.
“No está definida una posición neta, porque tampoco hay mucha oferta de terneros. Eso hace que estemos en un momento en el que existe un grado importante de incertidumbre respecto a cuál va ser el nuevo equilibrio de valores para esta categoría”, explicó.
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