Tras pico de casos en mayo hay menos infecciones respiratorias

Los datos obtenidos en las últimas dos semanas en los siete centros centinela han registrado una estabilización en la cantidad de personas que ingresan a los hospitales debido a infecciones respiratorias agudas graves.

"Se ha moderado la situación. Llegamos en un momento a tener casi un 9% de ocupación de las camas de hospitales por infecciones respiratorias. Eso dejó de aumentar y tiende a bajar", aseguró Henry Albornoz, de la Cátedra de Enfermedades Infecciosas de la Facultad de Medicina de la Universidad de la República.

Lo mismo ocurrió con los ingresos a Unidades de Cuidados Intensivos. Desde que comenzaron los casos de gripe este año, a finales de abril, el pico de infecciones respiratorias determinó que en un momento el 15% de las camas ocupadas en centros de salud fueran por esta causa.

Los expertos de la Facultad de Medicina en enfermedades infecciosas aseguran que no saben cómo va a evolucionar la epidemia de la gripe, pero que se estabilizó la situación.

De hecho, la cantidad de consultas a emergencias móviles por gripe provocó una saturación, que hizo que se atrasara la atención a llamados que no eran de urgencia. Esas consultas también descendieron en las últimas dos semanas.

Este año se produjo una nueva circulación de la gripe A subtipo H1N1, que fue la que produjo la pandemia en 2009. Fue un brote anticipado, porque el pico de casos fue en mayo, cuando normalmente se registra en los meses de junio y julio, provocado por el invierno anticipado.

Eso hizo que la cantidad de consultas por gripe aumentaran y que se registrara más de una decena de muertes por esta causa.

La principal medida de prevención son las vacunas, según los expertos, ya que disminuye las probabildiades de contraer gripe y en caso de hacerlo, de desarrollar casos graves.

Las 500.000 dosis que se adquirieron inicialmente se acabaron en pocas semanas, luego de que la información de que cuatro personas habían muerto por gripe disparara las cifras de vacunación.

El pasado martes se retomó la vacunación con las 100.000 dosis que llegaron desde Francia. Las autoridades sanitarias enfatizan que se proteja la población de riesgo: mujeres embarazadas, niños de seis meses a cinco años, adultos mayores de 65 años y el personal de salud.

"Las tasas de vacunación son pésimas; por suerte este año luego del susto se vacunó más la gente", aseguró Graciela Pérez Sartori, de la Cátedra de Enfermedades Infecciosas de la Facultad de Medicina.

Este año la campaña de vacunación fue problemática desde el comienzo: las dosis llegaron varias semanas más tarde de lo esperado y se acabaron antes de que se vacunara gran parte de la población de riesgo.

Además, por dos semanas, los centros de vacunación de todo el país estuvieron sin dosis, lo que agravó el problema porque una vez que una persona es vacunada, ésta empieza a hacer efecto 20 días después.

En ese sentido, en una conferencia organizada por el Colegio Médico del Uruguay, realizada ayer sobre "Gripe: situación actual y perspectiva futura", una médica presente en el encuentro manifestó que el gobierno no tomó la previsión adecuada, de dar la vacuna a partir de marzo, y se tomó una previsión muy tardía que habilitó la epidemia que provocó más de una decena de muertes.

En ese sentido, la experta en enfermedades infecciosas, Graciela Pérez Sartori, aseguró que "lo ideal es que la campaña de vacunación comience antes de que empiece a circular el virus, en el mes de marzo".