Cadena de favores: los empresarios exitosos que respaldan a jóvenes startups

De hecho, en los últimos años ha aumentado el apoyo de los empresarios exitosos a nuevos modelos de negocios o a jóvenes startups. Se trata de una idea similar a la que plantea la película.  

La metáfora fue utilizada por Sergio Fogel, cofundador de la empresa de servicios de pago en línea Astropay en 2009, y de la primera empresa uruguaya en superar los US$ 1.000 millones en valoración (unicornio), dLocal. En el intercambio que mantuvo con Café & Negocios expresó que “sin dudas” hay una tendencia en el mercado uruguayo a que los empresarios más exitosos inviertan su tiempo y capital en el sistema emprendedor de alto impacto. 

“En el mundo de la tecnología hay una filosofía de Pay it Forward (‘cadena de favores’, en español)”, explicó Fogel. “Para llegar adonde estoy, mucha gente me ayudó. Ahora es mi turno de ayudar a otros, ya sea invirtiendo, mentoreando, o apoyando de otra forma”, añadió. 

Fogel eligió potenciar a Datanomik, una fintech en soluciones en open banking (banca abierta) que, antes de convertirse en una startup como tal, se concibió como una solución para Astropay ideada por Gonzalo Strauss, el entonces jefe de Producto de la tecnológica. 

Cuando Strauss le llevó a Fogel esta idea, el creador de dLocal supo que se trataba de algo más que un producto. Fue entonces cuando ambos se pusieron a trabajar en lo que hoy es Datanomik, empresa que ya levantó su primera ronda de inversión valuada en US$ 6 millones. 

En Uruguay, hay varias organizaciones, como Endeavor, que se encargan de generar entramados en los que nuevos emprendedores puedan potenciar y desarrollar sus ideas de negocios. 

En este sentido, el jefe de directorio de esa organización para Uruguay, Eduardo Mangarelli, explicó que, si bien estas prácticas “no son nuevas”, “las experiencias con dLocal y ahora con Nowports —un unicornio fundado por el empresario uruguayo Maximiliano Casal— han visibilizado más” las experiencias de apoyo en el ecosistema emprendedor y también han despertado más interés del público en general.

En esta línea, Mangarelli expresó que altos ejecutivos con trayectoria en el ambiente emprendedor del país —como Gabriel Colla (fundador de Infocorp), Martín Alcalá (creador de Tryolabs) y Santiago Pehar (fundador de Bora Ventures)— han apalancado diferentes startups. 

¿Por qué es importante que los empresarios ya consolidados colaboren con este tipo de negocios que están naciendo? “Porque todavía no existen tantos casos de éxito que inspiren a fundadores a crear nuevas empresas. Sin embargo, hay muchos problemas u oportunidades que están a la espera de que alguien pueda construir soluciones para ellas”, explicó Casal a Café & Negocios. 

“Lo principal que podemos aportar es nuestra experiencia y ayudar a los emprendedores a que no cometan los mismos errores que nosotros. Errores van a tener que enfrentar, pero al menos que sean otros y equivocarse lo menos posible”, agregó el cofundador de Nowports, la tecnológica que permite saber en tiempo real dónde se encuentran las cargas mientras viajan de puerto a puerto, y que este año llegó a valorarse en US$ 1.100 millones. 

Hace unos días, Casal se unió como inversor y advisor (tutor) para la startup For Me, el primer Social Commerce (comercio social) de productos de belleza en América Latina.

Por otro lado, el empresario argentino Sebatian Stranieri, CEO y fundador de VU (una empresa líder en ciberseguridad que está presente en 27 países), opinó que en Uruguay “hay una tierra muy fértil para construir un ecosistema más grande”. “Se está viendo mucho movimiento en el último tiempo. 

De hecho, hay gente muy importante en el mundo de los negocios que se está mudando para acá, como David Vélez, el fundador de Nubank (la tecnofinanciera más grande de América Latina)”, aseveró el experto en ciberseguridad que ha invertido y mentoreado a Strike Security, una empresa que analiza y potencia los sistemas de seguridad de las organizaciones. 

Además, Stranieri considera que ya existen empresarios, como Fogel, y antecedentes, como Pedidos Ya y Tienda Mía, que potencian a la comunidad emprendedora del país. 

Según Stranieri, el trayecto transitado por los emprendedores ya consagrados permite indicarle a quienes pretenden desarrollar su idea de negocio qué priorizar, por dónde ir o cómo actuar frente a determinadas situaciones. La experiencia vertida a favor de los nuevos emprendimientos es un factor que “muchas veces es más valioso que el propio capital que puedan inyectar a la startup”, explicó Mangarelli. 

“Muchas iniciativas fallan y no necesariamente es por un tema de capital inicial, sino por la modalidad en que se concreta”, argumentó Stranieri.

En este sentido, Stranieri explicó que la primera ayuda económica por parte de un empresario cuando pretende apalancar un nuevo proyecto puede ir desde los US$ 10 mil a los US$ 100 mil. 

Datanomik, una solución que llegó a ser empresa

Cuando era jefe de Producto en la empresa Astropay, Gonzalo Strauss —un desarrollador que en la actualidad tiene 25 años— debía tener relación con todas las áreas de la empresa. “Al estar en contacto con todos los sectores me di cuenta de que varias de las problemáticas venían de un denominador común: el acceso a la información financiera”, recuerda Strauss en diálogo con Café & Negocios. 

Los empleados de Astropay accedían a los datos económicos de diferentes fuentes y de manera manual. “Era tedioso y muy poco eficiente, por lo que comenzamos a buscar soluciones por fuera, ya armadas, pero no las encontramos”, rememora Strauss. La empresa llegó a tener en aquel momento más de 500 cuentas en todo el mundo.

En ese momento “empezamos a desarrollar un producto interno que permitiera afrontar el problema” de la empresa de Fogel. 

Luego de tres meses de desarrollo el producto quedó finalizado. “En un momento nos dimos cuenta de que esa solución no era solo aplicable para Astropay, también podía funcionar para dLocal o para cualquier otra fintech”, indica el creador de Datanomik. Fue en ese momento cuando el joven desarrollador decidió ir a hablar con su jefe, Sergio Fogel. 

Mano a mano con el ya consagrado empresario, el entonces jefe de Producto de la empresa le explicó sobre la solución que habían ideado. 
“Esto da para mucho más, ya tenés un cliente”, le expresó Fogel a Strauss. Fue entonces cuando ambos comenzaron a trabajar en potenciar aquel producto. 

“Salimos a buscar interés en el mercado, esto significa lograr la validez de los inversores”, narró Strauss.

Y así fue. “Logramos demostrar que al buscar resolver una problemática nuestra, también podíamos resolver una problemática de varias empresas del rubro”, añadió el desarrollador. 

Para atravesar esa fase “fue fundamental el apoyo de Fogel, que sobre todo me apoyó mucho en el desarrollo estratégico de la startup”, subraya Strauss. 

Así nació Datanomik, un sistema de banca abierta en línea que es utilizado por organizaciones financieras (desde empresas fintech hasta bancos), en el que estas instituciones comparten información y cruzan datos.

Datanomik logró levantar US$ 6 millones este año en lo que significó su primera ronda inversión.

El capital semilla estuvo solventada por tres firmas de capital de riesgo con peso en el mundo de las startups: la mexicana Nazca; la brasileña Canary y la estadounidense Andreessen Horowitz.

Hoy, la startup ya se encuentra en varios países de la región además de Uruguay, como Argentina, Brasil y Colombia.

For Me, la startup que apuesta a la belleza real 

For Me nació en 2019 como iniciativa de tres mujeres que venían del mundo corporativo: Denise Henry, Consuelo Chasseing  y Romina Mahboub.

“Sentíamos un hueco, un vacío que existía en el mundo de la belleza, en el cual veíamos que las grandes marcas querían estar más cerca de sus usuarios, pero no lograban tener un puente que las acercara y, al mismo tiempo, notábamos que muchas consumidoras querían tener mayor llegada a esas marcas”, explicó Henry a Café & Negocios. 

Como “la belleza siempre ha permitido crecimiento y empoderamiento empezamos a idear un modelo de negocios que pudiera consolidarse como una solución a esta problemática que notábamos”, agregó Henry.

Fue así como nació For Me, el primer social commerce de beauty care en América Latina, con dos líneas de negocios: marketing y comercio. 

For Me, por un lado, apalanca a usuarios de las redes sociales que crean contenido sobre la aplicación de productos de belleza —como perfumes, cremas o maquillaje—, los impulsa a que cuenten sus experiencias, a través de diferentes capacitaciones y acercándoles diferentes productos, con el objetivo de que puedan crecer como referentes.

Por el otro, la startup trabaja con las diferentes marcas acercándoles consumidores genuinos para que prueben sus productos y estas conozcan sus opiniones, “para amplificar el concepto de marketing”, explicaron las empresarias. 

A la vez, la empresa tiene una línea de negocio asociada al comercio social. En este sentido, For Me busca y selecciona dentro de los usuarios que crean contenido para sus redes sociales a personas para que comercialicen los productos de belleza.

“Ya cerramos un acuerdo con Walmart en México para desarrollar esta línea de negocio”, confirmó Henry.

La startup argentina llegó el año pasado a Uruguay y ya se encuentra en Colombia, Perú y México. For Me trabaja con más de 30 marcas y ha sido socio estratégico de, por ejemplo, Vogue, L’Oreal, y  Maybelline. 

En la actualidad, For Me cuenta con el apoyo del empresario uruguayo Maximiliano Casal para continuar con su expansión.

Strike Security, a prueba de ataques 

Santiago Rosenblatt siempre sintió curiosidad por las computadoras. A los 6 años llegó a hackear a una empresa y a principios de 2020, con 23 años, empezó a pensar en un negocio para combatir los ataques cibernéticos que sufrían las empresas. 

“Con 8 años ya hacía destrozos con la computadora”, cuenta entre risas  Rosenblatt a Café & Negocios. “Fue por eso que me puse a pensar por qué empresas tan grandes gastan tanto y aún así pueden ser hackeadas”. 

Para ese entonces, Rosenblatt ya había pasado por Mercado Libre y dLocal, trabajando en áreas vinculadas a ciberseguridad. Cuando ideó su solución, comenzó a reunirse con diferentes empresarios y directores del mundo empresarial. 

Al poco tiempo, en 2021, ya había nacido su propia startup, Strike Security, que en la actualidad ha colaborado con diferentes fintechs tanto en América Latina como en Silicon Valley.

La tecnológica colabora con las organizaciones a través de la prueba y la mejora de sus sistemas informáticos.

Durante este año, la startup levantó su primera ronda de capital semilla valorada en US$ 5.4 millones, solventada por Greyhound Capital, FJ Labs, Canary, NXTP, VentureFriends, Magma Partners, Latitud y OrokVentures. 

La empresa de Rosenblatt cuenta con posicionamiento en el mercado latinoamericano y espera llegar a Estados Unidos y Europa en el corto y mediano plazo. 

“Cuando cerramos la primera ronda conocí personalmente a Stranieri (el fundador de VU Security)”, recuerda Rosenblatt. Además de invertir, el CEO de VU Security ayudó al joven emprendedor a contactarse con otros inversores. 

Asimismo, Rosenblatt reconoció que contacta a Stranieri de modo frecuente para continuar adelante con su startup. “Nos movemos en un mundo en el que las inversiones son de riesgo, por lo que es sumamente importante contar con el apoyo de empresarios ya consagrados, como Stranieri, a quien le agradezco profundamente haberse acercado, pese a dirigir una empresa del mismo rubro; porque ellos disminuyen el riesgo y le dan validez a nuestras iniciativas”, concluyó Rosenblatt.