Con 13.956 presos este martes, Uruguay batió un nuevo récord de su población carcelaria, según información a la que accedió El Observador a través de la fiscalía. Es el cuarto año de la instrumentación del actual Código de Proceso Penal, que motivó un cambio en las gráficas sobre la cantidad de internos y su condición.
La cantidad de personas privadas de libertad crece de forma casi constante desde el año 2000. A principios de siglo eran 4.469 los reclusos y al cierre de 2015 eran 9.840. En los siguientes años el número se mantuvo estable apenas por encima de los 10 mil hasta 2019 cuando volvió a aumentar y se aceleró en 2020 para llegar a los 13.900. Hoy, en noviembre de 2021, hay 13.956.
Mientras en diciembre de 2017 –ya con un remozado Código General del Proceso– la mayoría de los presos estaba a la espera de su eventual condena, aspecto que se revirtió con la nueva norma ya avanzada en el marco de las investigaciones y el proceso judicial. El 69,8% de quienes estaban privados de libertad en diciembre de 2017, estaban en prisión preventiva, y el 30,2% restante, tenía la condena.
Sin embargo, eso cambió con el correr de los años y, para abril de 2021 los internos con prisión preventiva pasaron a ser el 17,1%. En esos niveles bajos se mantuvo desde enero de 2020 a la fecha, con oscilaciones entre el 15,8% y el 22,3%.
Respecto a las condenas, en ese mismo lapso, oscilaron entre el 77,7% y el 84,2%. Su pico fue en diciembre de 2020. La gráfica reúne datos de diciembre de 2017 a abril de 2021, y es creada basado en los datos del Instituto Nacional de Rehabilitación, actualizados al 2 de diciembre de 2020.
A partir de noviembre de 2017, los fiscales comenzaron a dirigir las investigaciones penales con la ayuda del Ministerio del Interior. A partir de allí, tanto la fiscalía como las defensas presentan sus argumentos y los jueces, como actores imparciales, resuelven. Con este cambio, pasaron a predominar los presos con condena, y el número de internos creció.
Entre febrero y diciembre de 2019 se obtuvo 1.458 imputaciones a personas promedio por mes; en el 2020 1.545 y en lo que va del 2021 se registró un promedio mensual de 1.416 personas. Esto supone que en lo que va del 2021 se logró 34% más imputaciones cada mes que en el momento de mayor productividad del sistema inquisitivo anterior (enero-octubre de 2017).
El crecimiento de esa población es uno de los motivos para explicar el aumento de los fallecimientos por causas naturales. Y también las muertes violentas. El año 2020 fue, con distancia, el que registró más suicidios en centros penitenciarios. Fueron 17 y representan más del doble de los que se habían reportado el año anterior.
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