Van 71 años y seguimos esperando la paz

Hoy, 9 de mayo, el Estado de Israel celebra su 71° Aniversario Día de la Independencia. En estos 71 años nuestra población creció de aproximadamente 806.000 (ochocientos seis mil) a 9:021.000 (nueve millones veintiún mil) habitantes. Desde nuestro establecimiento hasta hoy, hemos incorporado 3,2 millones de inmigrantes, 43% de ellos desde 1990. Sin embargo, el nivel de desempleo está a solo 4%, nuestro PBI per cápita es más alto que el de España, Portugal o Chipre y es aún más alto que el de todos nuestros vecinos juntos. Somos una democracia vibrante que invierte en educación, alta tecnología y salud.

Lamentablemente, el último fin de semana, los israelíes que viven en el sur del país se despertaron con otra andanada de cohetes desde Gaza. Desde el 4 de mayo hasta hoy, los grupos terroristas de la Yihad Islámica Palestina y de Hamás lanzaron casi 700 cohetes y morteros contra israelíes desde Gaza. Han matado a cuatro civiles, herido a decenas y destrozado las vidas de tantos otros. Los cohetes fueron lanzados en forma deliberada contra centros civiles y alcanzando carreteras, casas, una fábrica, e incluso un jardín de infantes y un hospital. Las escuelas en el sur de Israel cerraban mientras los niños continuaban buscando refugio en medio de explosiones.

Hamás, que gobierna la Franja de Gaza con mano de hierro, comete un doble crimen contra la humanidad, ataca indiscriminadamente a civiles israelíes mientras se esconden y operan entre la población de Gaza, utilizando así a sus habitantes como escudos humanos. Cuando Hamás golpea a Israel, ataca a Gaza. El hecho de que Hamás almacene armas y dispare misiles desde los barrios civiles en forma rutinaria, muestra su absoluto desprecio por la vida humana y su intención de poner en peligro a los habitantes gazatíes. Como ese misil de Hamás dirigido a Israel que falló, provocando la trágica muerte de una mujer y un niño de Gaza, Falasteen Abu Arar y Saba Mahmoud.

Hamás y la Yihad Islámica Palestina, ambas calificadas internacionalmente como organizaciones terroristas, tienen una larga y sangrienta historia de ataques aéreos dirigidos contra civiles israelíes. En el pasado, la Yihad Islámica Palestina y Hamás llevaron a cabo cientos de atentados suicidas, disparos, apuñalamientos y ataques con embestidas, matando y mutilando a miles de personas en Israel. Ambas organizaciones terroristas son respaldadas por Irán y han realizado un llamamiento público al asesinato de israelíes, declarando su intención de destruir al Estado de Israel y establecer un califato islámico en su lugar.

Desde la violenta toma de la Franja de Gaza en 2007, cuando estaba gobernada por la Autoridad Palestina, Hamás ha lanzado hacia Israel más de 12.000 misiles y morteros. Durante años, Hamás ha estado desarrollando sus capacidades militares, utilizando fondos destinados a los civiles de Gaza y extorsionando a la economía local para aumentar sus arsenales de armas y construir túneles de ataque transfronterizos. Israel procura una frontera pacífica con la Franja de Gaza, pero mientras Hamás siga avivando las llamas del conflicto en lugar de servir a su propio pueblo, la violencia prevalecerá sobre la paz.

Durante casi tres cuartos de siglo, el Estado de Israel se ha visto obligado a lidiar con una amenaza tras otra. A pesar de las amenazas en curso, Israel ha prosperado; no sólo ha pasado de ser una nación pobre a ser una nación desarrollada en el lapso de unas pocas décadas, sino que se ha convertido en una potencia mundial en materia de innovación. Ha perseguido continuamente la paz, de hecho, la ha logrado con sus vecinos Egipto y Jordania. Esperamos que algún día cercano alcancemos también junto a nuestros vecinos palestinos esa tan anhelada paz.