Volatilidad caracterizará a los negocios por trigo

Los contratos del trigo en el mercado estadounidense y el mercado europeo rebotaron en la semana pasada y en el comienzo de la presente, debido a las especulaciones sobre una restricción de las exportaciones desde Rusia.

En ese país la alta presión inflacionaria con la devaluación del rublo genera preocupación sobre la evolución del precio de los alimentos y eso alimentó las versiones sobre una posible restricción de las exportaciones.

Además, también inciden las difíciles condiciones en las que se sembraron los cultivos de trigo en Rusia y en partes de Ucrania, debido a la sequía y luego a las muy bajas temperaturas.

Todo esto generó un rebote que para algunos operadores pudo haber sido excesivo, pero es evidente que va a persistir la volatilidad en las próximas semanas en función de las señales que haya desde Moscú junto a lo que suceda con el clima, tanto en el Mar Negro como en Estados Unidos.

A nivel de la soja, la demanda ha dado sostén a los precios aunque en una tendencia que ha sido bajista en las últimas semanas.

Este jueves el reporte de exportaciones del Departamento de Agricultura fue positivo y sólido respecto a la soja y a la harina de soja, lo que permitió sostener los precios.

Desde el lado de la oferta las miradas se concentrarán a partir de ahora, cada vez más, en lo que suceda con el clima en América del Sur, donde las lluvias han sido positivas en Brasil y también en Argentina.