El presidente argentino, Javier Milei, participó por primera vez de la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU) en un discurso donde lanzó duras críticas contra la organización y su papel en el escenario global. Milei calificó a la ONU como un "Leviatán de múltiples tentáculos" y acusó al organismo de imponer una agenda ideológica de corte socialista a sus países miembros, haciendo especial hincapié en la Agenda 2030. En su intervención, también adelantó un cambio significativo en la política exterior de Argentina, anunciando el fin de la neutralidad histórica del país.
Milei apuntó directamente contra la Agenda 2030, el plan de desarrollo sostenible promovido por la ONU desde 2015. Según el presidente, dicha agenda no es más que un "programa de gobierno supranacional de corte socialista" que vulnera la soberanía de los Estados-nación y los derechos individuales de las personas. “La Agenda 2030, aunque bienintencionada en sus metas, pretende resolver la pobreza y la discriminación con legislación que lo único que hace es profundizarlas", aseguró Milei ante la Asamblea.
Durante su alocución, también acusó a la ONU de haber perdido de vista sus principios fundacionales, transformándose en una entidad que busca imponer una agenda ideológica a los países miembros. “En algún momento, esta organización dejó de velar por los principios esbozados en su declaración fundante y comenzó a mutar", sostuvo el mandatario argentino. Además, denunció que la organización "pretende decidir no solo qué debe hacer cada Estado-nación, sino también cómo deben vivir todos los ciudadanos del mundo".
Milei también criticó a la ONU por lo que considera un doble estándar en la defensa de los derechos humanos. Señaló que el Consejo de Derechos Humanos de la ONU incluye dictaduras como Cuba y Venezuela, sin recibir "el más mínimo reproche". En ese sentido, afirmó que “en esta misma casa, que dice defender los derechos humanos, han permitido el ingreso al Consejo de Derechos Humanos a dictaduras sangrientas sin cuestionarlas”.
Fin de la neutralidad argentina en el plano internacional
Uno de los anuncios más significativos del discurso de Milei fue su declaración de que Argentina abandonará su posición histórica de neutralidad en la arena internacional. El mandatario subrayó que el país pasará a liderar la defensa de la libertad a nivel global, en una postura que contrasta con la política exterior que ha caracterizado a la nación en décadas pasadas. "A partir de este día, sepan que la República Argentina va a abandonar la posición de neutralidad histórica que nos caracterizó, y va a estar a la vanguardia de la lucha en defensa de la libertad", afirmó.
El presidente también propuso la creación de lo que llamó "la agenda de la libertad", como una alternativa a la Agenda 2030 impulsada por la ONU. Invitó a "todas las naciones del mundo libre" a sumarse a este nuevo enfoque, asegurando que Argentina está comprometida con la defensa de los derechos inalienables como la vida, la libertad y la propiedad. "Todavía estamos a tiempo de apartarnos de este rumbo", expresó Milei, haciendo un llamado a replantear el camino que la ONU ha tomado en las últimas décadas.
Milei también aprovechó su intervención para defender al Estado de Israel, cuestionando a la ONU por haber sido "impotente" en brindar soluciones a los conflictos globales, entre ellos, la invasión rusa a Ucrania y el conflicto israelí-palestino. Afirmó que "sistemáticamente se ha votado en contra del Estado de Israel, que es el único país de Medio Oriente que defiende la democracia liberal", y acusó al organismo de ser incapaz de responder al "flagelo del terrorismo".
Acusaciones sobre la gestión de la pandemia y críticas a las políticas económicas
Otro punto clave del discurso de Milei fue su crítica al manejo de la pandemia de COVID-19 por parte de la comunidad internacional, señalando las cuarentenas como un ejemplo de la violación de las libertades individuales impulsada por la ONU. “Hemos visto cómo una organización que nació para defender los derechos del hombre ha sido una de las principales propulsoras de la violación sistemática de la libertad, como las cuarentenas a nivel global durante el año 2020, que deberían ser consideradas delitos de lesa humanidad”, enfatizó el presidente argentino.
Milei también criticó las políticas económicas promovidas por la ONU y los organismos internacionales, a los que acusó de imponer restricciones a los países en desarrollo, convirtiéndolos en "deudores perpetuos" de las élites globales. "En el plano económico, se han promovido políticas colectivistas que atentan contra el crecimiento económico, violentan los derechos de propiedad y entorpecen el proceso económico natural", afirmó. Según el mandatario, las regulaciones y prohibiciones impulsadas por la ONU y los países desarrollados son las mismas que esos países ignoraron cuando estaban en pleno proceso de desarrollo. "Regulaciones y prohibiciones impulsadas precisamente por los países que se desarrollaron gracias a hacer lo mismo que hoy condenan", subrayó.
En su crítica a la gestión económica global, Milei también destacó lo que considera una relación "tóxica" entre los organismos de crédito internacionales y los países menos desarrollados, asegurando que estas instituciones imponen políticas que terminan obstaculizando el progreso económico. "Se ha impuesto una relación que convierte a las naciones más pobres en deudores perpetuos de las élites globales", concluyó.
El discurso de Milei concluyó con un llamado a todas las naciones a replantear el rumbo que ha tomado la ONU en los últimos años. "Invitamos a todas las naciones del mundo libre a que nos acompañen no solo en el disenso de este pacto, sino en la creación de una nueva agenda para esta noble institución: la agenda de la libertad", expresó el presidente argentino.
Milei insistió en que los principios que guían el proceso de cambio en Argentina —el derecho a la vida, la libertad y la propiedad— también deben ser los pilares de la conducta internacional del país. "Esos principios, que ordenan el proceso de cambio que estamos llevando adelante en la Argentina, son también los principios que guiarán nuestra conducta internacional a partir de ahora", sentenció.