Sara Aagesen, ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico de España, y Maria da Graça Carvalho, ministra de Medio Ambiente y Energía de Portugal, enviaron una carta al ministro francés de Industria y Energía, Marc Ferracci, en la que instan a Francia a establecer "plazos concretos y compromisos vinculantes" para el desarrollo de los corredores estratégicos de interconexión eléctrica entre la Península Ibérica y el país vecino. En su misiva, ambos gobiernos subrayan que la aceleración de estas interconexiones debe ser una "prioridad absoluta", no solo para los países ibéricos, sino también para la Unión Europea.
En la carta, firmada por las dos ministras, se propone la convocatoria de una reunión a tres bandas con la Comisión Europea este año, con el objetivo de "definir una hoja de ruta conjunta con hitos y pasos concretos para cumplir los objetivos europeos". La misiva también resalta la "importancia estratégica y la urgencia" de acelerar la finalización de las interconexiones eléctricas entre España, Portugal y Francia, un tema que, según los firmantes, se ha mantenido en la "agenda común" de la Unión Europea debido a su relevancia para el sistema energético europeo.
El apagón renovó la atención en las interconexiones eléctricas
El apagón de la Península Ibérica ocurrido el 28 de abril es mencionado como un factor clave que renovó la atención sobre la necesidad de fortalecer la infraestructura de interconexión. En la carta, Aagesen y Carvalho aseguran que este incidente "ilustró claramente el papel crucial de la conectividad transfronteriza para salvaguardar la estabilidad del sistema eléctrico europeo en situaciones de tensión". Además, afirman que este suceso ha reforzado la urgencia de actuar "con decisión tanto a nivel técnico como político" para evitar futuras crisis.
En este sentido, las ministras reafirman que "acelerar la finalización de las interconexiones eléctricas con la Península Ibérica debe ser una de las máximas prioridades, no solo para España y Portugal, sino para la Unión Europea en su conjunto". A pesar de los avances realizados en los últimos años, tanto España como Portugal insisten en que la Península Ibérica sigue siendo, en la práctica, "una isla energética", ya que sus niveles de interconexión con el resto de Europa se encuentran muy por debajo de los objetivos establecidos por la UE. Actualmente, la interconexión de la Península Ibérica está por debajo del 3%, lejos del objetivo del 10% para 2020 y el 15% para 2030, lo que se considera una "vulnerabilidad sistémica dentro del sistema energético europeo".
Además de los aspectos técnicos, ambos países destacan la relevancia de las interconexiones para avanzar en otros objetivos clave de la Unión Europea, como la descarbonización, la convergencia de precios, la competitividad, la seguridad del suministro y la resiliencia del sistema energético. Según las ministras, estos objetivos son esenciales para lograr una "auténtica Unión de la Energía" y un mercado interior funcional, garantizando la cohesión entre los Estados miembros de la UE.
Por otro lado, España y Portugal expresaron su descontento por la exclusión de dos proyectos clave de interconexión con Francia del plan de desarrollo de la red francesa 2025-2035. Estos proyectos, Aragón-Pirineos Atlánticos y Navarra-Las Landas, habían sido reconocidos previamente por la UE como Proyectos de Interés Común (PCI). En la carta, ambos países lamentan que, a pesar de su importancia estratégica, estos proyectos no se incluyan en el plan de desarrollo, lo que podría retrasar la mejora de la infraestructura de interconexión.
Finalmente, España y Portugal recuerdan que, tras la Cumbre de Faro en octubre de 2024, el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y el primer ministro luso, António Costa, enviaron una carta conjunta al presidente francés, Emmanuel Macron, expresando su preocupación por la situación y reiterando la urgencia de avanzar en la mejora de las interconexiones eléctricas.
