La Argentina fue invitada de honor y la Ciudad de Buenos Aires aportó teatro y música a la capital española.
Los actores Luciano Castro, Griselda Siciliani, la cantante Elena Roger y el actor Joaquín Furriel.
Siempre es así. El volumen del sonido se eleva cuando coinciden españoles y argentinos en un mismo espacio. Sobre todo, si es en un teatro.
Es la semana de la Hispanidad en la que la Argentina es la invitada de honor de la Comunidad de Madrid. En Teatros del Canal se presentaron La verdadera historia de Ricardo III, en un montaje protagonizado por el actor Joaquín Furriel y la comedia Sansón de las islas recrea la caída de un ídolo popular, con Luciano Castro en el papel principal,
Los elencos completos, distendidos, se reunieron para celebrar una semana de salas llenas y la buena acogida del público madrileño. Pero además, hubo yapa. Entre vinos argentinos y empanadas de carne picante, se subió al escenario del salón una cantante consagrada mundialmente y argentinísima. Delgada, con brillos, Elena Roger arranca con una canción de Charly García. Empieza con Seminare, y sigue con Canción de Alicia en el país, y termina con Desarma y sangra como ella solo puede hacerlo. Es parte de un show que viene preparando con el pianista Gerardo Gardelín, que llevará el título de “Invasiones”.
Entonces ya nadie habla cuando Elena Roger se mete con la obra del hombre del oído absoluto. Y el coro en la sala entona "se acabó ese juego que te hacía feliz".
Del número uno del rock argentino que ha contado en sus letras una buena parte de la historia flamígera de la Argentina. El gran Charly García, protagonista de la música cantada en español desde el dúo Sui Generis, la banda conocida como La Máquina de hacer pájaros, luego la insuperable Seru Girán y, al final, su obra solista, que demostró hasta que alturas podía llegar el genio.
En el madrileño Teatros del Canal suena entonces la consagrada Elena Roger (“Evita” en Londres y en Nueva York, solo para mencionar uno de sus grandes éxitos), y después sonará la voz de Florencia Lazarte, porque la Orquesta Del Plata llenó de tangos el final de la noche. Nadie se quería ir entre tanta emoción.
Los dos actores argentinos, Furriel y Castro, junto a la popular actriz Griselda Siciliani, presente en la sala, reparten abrazos en el evento teatral y acceden a los pedidos de selfies sin que se les borre la sonrisa. El ministro de Cultura, Deportes y Turismo de la Comunidad de Madrid, Mariano de Paco Serrano, grita “somos hermanos hispanos”, y su colega argentina en la Ciudad de Buenos Aires, Gabriela Ricardes, describe la cascada de actividades que incluyen, además del teatro, las actuaciones de Sandra Mihanovich, del grupo Miranda y festivales de tango en el Matadero.
En el atestado Teatros del Canal también canta el ministro de Desarrollo Económico, Hernán Lombardi, al frente de una comitiva que integran el titular del Ente de Turismo porteño, Valentín Díaz Gilligan, y poniéndole combustible a la movida cultural de la Ciudad en Madrid, el periodista Facundo Landívar. Todos son parte de una delegación que tiene como máxima exponente a la vicejefa de Buenos Aires, Clara Muzzio.
Los encargados de la seguridad apagan las luces porque madrileños y porteños se resisten a terminar con los abrazos y las últimas copas de la noche. El teatro, la música y los planes para el futuro seguirán a pleno hasta el 12 de octubre.
Tango y flamenco. Fútbol y toros. Gardel y García Lorca. El puente de 500 años entre España y la Argentina, una vez más, está a salvo sobre los hombros de la cultura hispanoamericana.