La primera ministra danesa, Mette Frederiksen, calificó el episodio como “un ataque grave” contra la infraestructura del país nórdico. Sospechan que puedan ser parte de las provocaciones de Rusia.
Reabre el aeropuerto de Copenhagen.
Los aeropuertos de Copenhague y Oslo fueron reabiertos tras permanecer cerrados varias horas debido a la presencia de drones en sus espacios aéreos, informaron las autoridades locales.
El incidente obligó al desvío de múltiples vuelos y afectó a unos 20.000 pasajeros, de acuerdo con estimaciones policiales y aeroportuarias.
Las autoridades noruegas anticiparon retrasos, debido al impacto en la programación de vuelos.
En la capital danesa, varios drones de gran tamaño fueron detectados la noche del lunes sobrevolando la terminal aérea, lo que obligó a suspender operaciones durante horas.
La primera ministra danesa, Mette Frederiksen, calificó el episodio como “un ataque grave” contra la infraestructura del país nórdico. En un comunicado enviado a la agencia Ritzau, advirtió:
"La policía estima que se trata de un actor capacitado y está colaborando estrechamente con los servicios de inteligencia, el ejército y nuestros socios internacionales en la investigación en marcha".
El inspector Jens Jespersen señaló que, por "el número" de drones, su tamaño, las "rutas de vuelo" y "el tiempo sobre el aeropuerto", se presume que detrás del incidente se encuentra "un actor con capacidad", aunque aún no se ha identificado a los responsables.
La policía danesa confirmó que trabaja de la mano con las fuerzas armadas y los servicios de inteligencia del país y en coordinación con la policía noruega, dado que el aeropuerto de Oslo también se vio obligado a cerrar varias horas tras detectar drones en su espacio aéreo.
Aunque hasta el momento ninguna autoridad ha vinculado oficialmente los hechos con la ofensiva rusa en Ucrania, el uso de drones en espacios civiles europeos ha encendido las alarmas en plena guerra.
Los gobiernos de Dinamarca y Noruega no descartan que se trate de un intento deliberado de poner a prueba la seguridad aérea en la región.