Daniel Sancho, hijo del actor Rodolfo Sancho, está preso dede agosto de 2024 tras ser condenado a cadena perpetua en Tailandia por el asesinato, desmembramiento y ocultación del cadáver del cirujano colombiano Edwin Arrieta, ocurrido en agosto de 2023.
Desde su reclusión en la cárcel de Surat Thani, Sancho sigue diciendo que se trató de un homicidio imprudente derivado de una pelea, y su defensa ha presentado un recurso de apelación de más de 400 páginas para rebajar la pena o incluso reabrir el proceso.
En paralelo, desde prisión, ha iniciado una estrategia con la que pretende confrontar a quienes, según él, han difundido versiones “inexactas” o perjudiciales sobre su persona.
La “venganza legal”: demandas y querellas desde la cárcel
Según ha relatado Carmen Balfagón, portavoz del entorno de Sancho, a través del programa Fiesta, el recluso prepara un “aluvión de demandas y querellas” contra medios de comunicación, personas y el autor Joaquín Campos, responsable del libro Muerte en Tailandia.
Demanda contra Joaquín Campos
La primera acción legal está dirigida contra Campos. El equipo de Sancho sostiene que muchas de las afirmaciones incluidas en su obra y en declaraciones posteriores no se corresponderían con la realidad. La querella se elevará ante los juzgados de Málaga, donde se celebra el acto de conciliación el próximo 5 de noviembre.
Balfagón indica que ya existe otra demanda contra la editorial del libro, y apunta que el escrito presentado contra Campos alegará injurias y calumnias.
Apunta a los medios de comunicación
Además de esta querella, Sancho pretende actuar legalmente contra aquellos medios o individuos que, según su versión, han vertido informaciones distorsionadas. Balfagón advierte que se tomarán medidas “en un caso y en otro, querellas contra todos aquellos medios o personas que han dicho cosas que no se corresponden con la realidad”.
La defensa insiste en que muchas acusaciones mediáticas podrían incurrir en delitos de injurias o calumnias, si no pueden probarse.
La defensa y sus argumentos
El equipo legal de Sancho afirma que su cliente está ejerciendo su derecho a defender su reputación desde prisión. Asimismo, explican que este movimiento forma parte de una estrategia integral para cuestionar todas las versiones y reconstrucciones mediáticas que, en su opinión, agravan su caso injustamente.
Se destaca que la demanda contra Campos no se plantea por el libro en sí, pues ya existe otra acción contra la editorial, sino por declaraciones y contenidos que, según Balfagón, exceden lo factual.
La madre lo defiende
La madre de Sancho, Silvia Bronchalo, desmiente que él tenga privilegios en prisión. Asegura que duerme en una celda compartida y cumple una rutina común a muchos reclusos, come, reza y lee.
No obstante, otrasfuentes anteriores indican que Sancho dispondría de celda individual y mayor libertad dentro del penal.
Además, Bronchalo admite que las últimas informaciones han generado inestabilidad emocional: “Daniel está bien … unos días mejor, otros peor” dijo recientemente.
Qué dicen los expertos
Los juristas especialistas en derecho penal advierten de los riesgos: si las querellas no prosperan, podrían derivar en contrademandas o incluso agravar la situación procesal de Sancho.
Por su parte, la familia de Edwin Arrieta no ha manifestado apoyo a estas iniciativas legales, y algunos de sus abogados consideran que el recurso de apelación ya enfrenta serias barreras dadas las pruebas acumuladas.
Riesgos legales y próximos pasos judiciales
La “venganza legal” de Sancho podría desencadenar un pulso judicial en el que se cuestionen las fronteras entre la libertad de expresión, la crítica mediática y la responsabilidad penal por declaraciones falsas o difamatorias.
Su estrategia de demandas y querellas añade complejidad al proceso de apelación pendiente. Si los tribunales aceptan los recursos de Sancho, su condena podría revisarse parcialmente o incluso anularse y celebrarse un nuevo juicio.
