El ex canciller Álvaro Leyva desató una intensa controversia en Colombia tras publicar una carta en la que acusa al presidente Gustavo Petro de ser adicto a las drogas. Las afirmaciones de Leyva, que incluyen detalles de un supuesto incidente ocurrido en París en 2023, se suman a los episodios que han dejado al descubierto las fracturas internas y la falta de cohesión en el gobierno.
Leyva fue uno de los funcionarios más influyentes de la gestión de Petro hasta que la Procuraduría lo obligó a abandonar su cargo en mayo del año pasado por anular de manera irregular una licitación para la impresión de pasaportes. Aunque ya había expresado críticas al proceso de paz, la carta de cuatro páginas que entregó en el despacho de la presidencia, dirigida al mandatario y que posteriormente publicó en X, dejó en evidencia que el octogenario se transformó en un peligroso opositor.
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"Los recuerdos que todavía tengo frescos de episodios ocurridos, siendo yo el primer testigo, me producen aún desazón y desconcierto. Uno de ellos: la ocasión en que usted se desapareció dos días en París durante una visita oficial. Como si la inteligencia francesa fuera incompetente para no haber conocido su paradero. Momentos embarazosos para mí como persona y como su canciller. Y mucho más cuando supe en dónde había estado", dijo el ex canciller respecto a un viaje oficial a Francia en 2023.
Y Agregó: “Fue en París donde pude confirmar que usted tenía el problema de la drogadicción. ¿Pero qué podía yo hacer? Seguro fui inferior. Lo debí haber aproximado, ayudar, asistir oportunamente. Guardo en mi interior la pena de no haber intentado extenderle la mano. Lo cierto es que usted nunca se repuso. Es así. Su recuperación, lastimosamente, no ha tenido lugar".
Como es habitual, el presidente colombiano reaccionó a través de su cuenta en X a través de un mensaje en el que también cuestionó a la prensa: "La única manera para que la prensa publique cartas es insultándome. No solo habla mal del escritor, sino de la prensa. ¿Es que París no tiene parques, museos, librerías más interesantes que el escritor para pasar dos días? Casi todo en París es más interesante. ¿Es que acaso no tengo hijas y nietas en París, muchísimo más interesantes que el escritor?".
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Poco después, el mandatario amplió su defensa: "Se me volvió pecado estar con mi familia. Por vivir varios de mis hijos y mi madre en el extranjero, por la persecución que sufrimos, tengo muy pocas oportunidades de verla. No creí que ese hecho desatara suspicacias atroces en personas a las que les he dado la mano”.
Luego, en un acto en el que aprobó dos leyes contra el maltrato de los animales, Petro declaró de manera risueña que “nos enamoramos mucho. Somos adictos al amor, a propósito. ¿Por qué se pierde uno dos días? (risas) No hay que pensar mucho. Lo que pasa es que el escritor ya no puede hacer eso”.
La reacción de la oposición
Miembros de la oposición han aprovechado la controversia para exigir que Petro se someta a exámenes médicos que certifiquen su capacidad para ejercer su cargo, amparándose en el artículo 194 de la Constitución, que establece como causal de falta absoluta del presidente “la incapacidad física permanente”.
La senadora María Fernanda Cabal, del partido Centro Democrático fundado por el ex presidente Álvaro Uribe, explicó que introdujo en el Senado una solicitud para que “se exhorte a Gustavo Petro para que se haga exámenes toxicológicos y psiquiátricos que permitan evaluar su capacidad para conducir el país”.
Añadió que “una persona con problemas de adicción es una amenaza para la seguridad nacional. El país no puede estar en incertidumbre sobre la salud del presidente”.
Wilson Ruiz, quien se desempeñó como ministro de justicia en el gobierno del expresidente Iván Duque, informó que introdujo “una solicitud de investigación a la Comisión de Acusaciones ante la posibilidad de que Gustavo Petro esté tomando decisiones en un estado alterado de conciencia. Esto es una falta gravísima en el ejercicio del poder e investigarlo es una urgencia nacional”.
El ministro adicto
Leyva también reveló detalles sobre su relación con el actual ministro del interior, Armando Benedetti, quien anteriormente se desempeñó como embajador en Venezuela. Lo describió como un “adicto a las drogas”.
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El ministro del Interior de Colombia, Armando Benedetti
AFP
"Me correspondió nombrar a Armando Benedetti como embajador en Venezuela. Me dijo usted que hablara con él. Lo cité a mi apartamento. No quería aceptar la designación. Aspiraba a trabajar en una posición importante en Colombia. Quizá como un eventual ministro", afirmó Leyva en su carta.
"Como si yo estuviera al tanto de sus problemas personales, me manifestó que el doctor Miguel Bettín ya lo tenía al otro lado. Lo comentamos. Comprendí por todo lo que manifestaba que estaba adicto a las drogas. Bettín gran profesional de enorme reputación. De mi entrevista con Benedetti concluí que se trataba de un enfermo. Sigue igual señor presidente", agregó.
La falta de coordinación
El ex canciller describe a una administración sin mayor conducción donde a pesar de su cargo se le hizo imposible coordinar la política exterior con el presidente. Leyva afirmó que la entonces secretaria del Despacho de la Presidencia, Laura Sarabia, le bloqueó el acceso.
“Asumí la Cancillería con ánimo desprevenido, con deseos sí de lucirme buscando que usted alcanzara ser un líder continental y una esperanza mundial. Pero me sorprendió desde un comienzo que no nos pudiéramos sentar en ningún momento para trazar la política exterior del Estado”, dijo el ex canciller.
“Cuando iba a buscarlo, la señora Sarabia me hacía esperar por horas con la excusa de que usted eventualmente me recibiría. Tantas veces ocurrió lo mismo que finalmente comprendí que ella era la dueña de su tiempo, de algunos quehaceres suyos y que, además, le satisfacía algunas necesidades personales”, agregó Leyva.
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Un gobierno fracturado
En febrero de este año, Petro protagonizó otro episodio que evidenció las tensiones entre altos funcionarios del Estado. Durante un caótico consejo de ministros, transmitido en vivo por televisión, Colombia fue testigo de los enfrentamientos internos y la dificultad para alcanzar consensos en temas clave.
Esta crisis obligó al presidente a pedir la renuncia protocolaria de “ministras, ministros y directores de departamentos administrativos” y reestructuró el gabinete en un interno por lograr la cohesión del gobierno.
Pero la crisis no cesa. Laura Sarabia, quien actualmente se desempeña como canciller, mantiene una tensa disputa con Benedetti. A mediados de abril, Sarabia informó que entregó material a la Fiscalía que compromete al ministro del interior.
“En mi última declaración a la Fiscalía entregué audios y conversaciones con Armando Benedetti, incluso audios que no han sido conocidos por la opinión pública”, dijo la ministra, al revelar los trámites que presentó ante la fiscal séptima delegada ante la Corte Suprema de Justicia, que investiga presuntas irregularidades en la campaña presidencial de Petro en 2022. "Le he pedido a la Fiscalía escucharme en los próximos días para ampliar la investigación", añadió.
