Honduras se aleja de la izquierda: Tito Asfura, el candidato respaldado por Trump y Milei, lidera el conteo y se acerca a la presidencia
Los resultados de las presidenciales en Honduras muestran una contienda ajustada, con el candidato de derecha Nasry "Tito" Asfura picando en punta, seguido de cerca por el conservador Salvador Nasralla. La candidata de izquierda, Rixi Moncada, quedó 20 puntos más abajo. Al igual que Bolivia, otro país de América Latina gira hacia la derecha.
1 de diciembre 2025 - 13:15hs
El candidato a la presidencia de Honduras, “Tito” Nasry Asfura, emite su voto.
Honduras celebró elecciones presidenciales este domingo, con más de seis millones de ciudadanos habilitados para votar, en un clima de acusaciones de fraude y alta desconfianza electoral. Con el 55% de los votos escrutados, los resultados preliminares muestran una contienda ajustada: el empresario Nasry "Tito" Asfura, del Partido Nacional, lidera por un estrecho margen,seguido de cerca por el presentador Salvador Nasralla, del Partido Liberal. La candidata oficialista de izquierda, Rixi Moncada, sucesora de la actual mandataria Xiomara Castro, se sitúa veinte puntos más abajo, en unos comicios marcados por la polémica intervención de Donald Trump, quien 48 horas antes de la votación, respaldó a Asfura, anunció un indulto a un expresidente condenado y amenazó con cortar la ayuda a Honduras si su candidato preferido perdía.
El Consejo Nacional Electoral informó por la mañana del lunes los resultados preliminares y parciales. Según estos, “Tito” Asfura contaba con el 40% de los votos escrutados, mientras que Nasralla le seguía con el 39,8%. Por su parte, Moncada estaba en tercer lugar con el 19,2%. Asfura y Nasralla pelean ahora para conseguir la mayoría simple para ser el ganador, ya que en Honduras no hay segunda vuelta.
El CNE cuenta con un plazo máximo de 30 días para realizar la declaratoria oficial de los comicios. Más de seis millones de hondureños estaban habilitados para sufragar, en una jornada donde no solo se eligió al presidente y tres designados presidenciales (vicepresidentes), sino también a 128 diputados titulares y suplentes, y 298 alcaldes. La autoridad electoral aún no dio cifra de participación.
Salvador Nasralla, del Partido Liberal. elecciones Honduras. AFP
Candidato del Partido Liberal a la presidencia de Honduras, Salvador Nasralla.
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Tanto Asfura como Nasralla se abstuvieron de reclamar la victoria el domingo por la noche, asegurando que era demasiado pronto. Si bien hubo momentos de euforia en las sedes de ambos partidos, las calles de la capital se mantuvieron tranquilas mientras el CNE continuaba con el lento conteo de votos, informó AP.
El primer reporte oficial se divulgó con un retraso significativo, casi cinco horas después del cierre de las mesas y más de hora y media después de lo previsto. Ante la demora, Asfura compareció ante la prensa para urgir a los consejeros del organismo a cumplir con su deber de anunciar los resultados "por el bien de la democracia".
Por su parte, Moncada, quien al igual que Nasralla había denunciado un posible fraude durante la campaña, llamó a sus seguidores en la red social X a mantenerse "en pie de lucha" hasta obtener el escrutinio completo de todas las actas.
Elecciones Honduras 2. AFP
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La elección contó con la participación de más de 4.000 observadores nacionales e internacionales, incluidos representantes de la Unión Europea, congresistas de Estados Unidos y la Organización de los Estados Americanos (OEA), que afirmó que la jornada se desarrolló en calma.
El factor Trump
En vísperas de los comicios, Trump se metió de lleno en la elección hondureña, una práctica que se volvió recurrente en los procesos electorales de América Latina. A través de su red social Truth Social, el presidente de EEUU le dio su apoyo explícito a Asfura, a quien describió como el "único verdadero amigo de la libertad" y su aliado para "combatir a los narcocomunistas" de Cuba, Nicaragua y Venezuela, buscando impedir así que Nicolás Maduro "tome el control" del país.
Además, apuntó directamente contra los otros candidatos. Acusó a Salvador Nasralla de ser "casi comunista" y de intentar "engañar al pueblo" al fingir ser anticomunista "solo para dividir el voto de Asfura". Y sobre Moncada, el mandatario estadounidense recordó su afinidad con Fidel Castro y advirtió sobre los riesgos de esa senda. "No puedo colaborar con Moncada y los comunistas", así que "espero que el pueblo de Honduras vote por la libertad y la democracia", cerró el mandatario.
Rixi Moncada, del partido oficialista Libertad y Refundación (Libre), de izquierda. AFP
La candidata oficialista de izquierda, Rixi Moncada, vota en las elecciones del domingo.
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La intervención escaló el viernes, cuando Trump sumó un nuevo anuncio: prometió que indultará al expresidente Juan Orlando Hernández, del mismo partido que Asfura, y amenazó con un recorte de la ayuda al país centroamericano si su candidato perdía. "Si [Asfura] no gana, Estados Unidos no malgastará más dinero, porque un líder equivocado solo puede traer resultados catastróficos a un país, sea cual sea", sentenció.
Tras el anuncio de Trump, Asfura aseguró no tener "ninguna vinculación" con Hernández. "Yo no tengo ninguna vinculación (con Hernández). Él fue presidente de la República, el partido no es responsable de las acciones personales", dijo el candidato a la agencia AFP. Hernández llegó extraditado en abril de 2022 a Estados Unidos, donde en marzo de 2024 lo sentenciaron a 45 años de prisión por tres cargos de narcotráfico y armas, más cinco años de libertad vigilada. Al ex mandatario lo acusaron de haber recibido dinero del "Chapo" Guzmán para financiar fraudes electorales a cambio de participar en una conspiración que introdujo más de 500 toneladas de cocaína en el país.
Honduras es el cuarto país de Latinoamérica en celebrar elecciones presidenciales este año. Le precedieron Ecuador y Bolivia, donde la derecha se impuso con Daniel Noboa y Rodrigo Paz, respectivamente. En Chile también se celebraron comicios, y el 14 de diciembre el país podría virar hacia la derecha si José Antonio Kast derrota a la oficialista Jeannette Jara en el balotaje. A pesar de su lema "Estados Unidos primero" ( America First), el republicano siguió con atención al continente, buscando activamente aliados, como el presidente argentino Javier Milei, quien también hizo publico su apoyo a Asfura, o el exmandatario brasileño Jair Bolsonaro, mientras intenta frenar la creciente influencia de China.
Elecciones Honduras 3. AFP
La transparencia, un desafío de la elección
Las campañas destacaron más por los ataques y las descalificaciones que por las propuestas a la población, en un país donde el 60% de sus 11 millones de habitantes vive en la pobreza. Castro, esposa del ex presidente Manuel Zelaya, derrocado el 28 de junio de 2009 cuando un grupo de militares lo sacó a la fuerza de su casa mientras estaba en piyamas, dejará la presidencia el 27 de enero. El golpe de Estado contra Zelaya, amigo de la Venezuela de Hugo Chávez y acusado de querer perpetuar su poder, dejó una fuerte marca y provocó división en Honduras.
Después de 12 años de gobiernos de derecha, el ex mandatario volvió al primer plano en 2021, cuando su esposa se convirtió en la primera mujer presidenta del país, de la cual es su principal asesor.
Esta no es la primera vez que en Honduras hay desconfianza en los resultados electorales. Eso pasó en 2013 y 2017, cuando fueron cuestionados por Castro y Nasralla, respectivamente. En ambas ocasiones fue declarado ganador el ahora condenado Juan Orlando Hernández, pese a que la reelección está prohibida en la Constitución.
Elecciones Honduras 1. AFP
Uno de los motivos de preocupación en estas elecciones es la acusación de injerencia de las Fuerzas Armadas en el proceso, cuya cúpula es cercana a Castro y Zelaya. El jefe del Estado Mayor Conjunto, Roosevelt Hernández, pidió a los integrantes del CNE que el día de la votación le entreguen una copia del acta con los resultados, algo inédito.
Los retos del próximo gobierno: violencia y pobreza
Pese a su retórica de izquierda, Xiomara Castro se mostró pragmática en su relación con la administración Trump y recibió la visita de la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, y de Laura Richardson, cuando la generala estadounidense encabezaba el Comando Sur de EEUU. Además, dio marcha atrás con su decisión de poner fin al tratado de extradición de Honduras y a la cooperación militar con Estados Unidos.
La oposición había acusado a la mandataria de querer cancelar el tratado, que permitió encarcelar a medio centenar de narcotraficantes hondureños, entre ellos el ex presidente Hernández, para proteger a miembros de su gobierno y de su familia. El año pasado, su cuñado Carlos Zelaya, diputado y secretario del Congreso, renunció a su cargo tras admitir ante la fiscalía que se reunió con narcos en 2013. Esto derivó a su vez en la dimisión del ministro de Defensa, José Manuel Zelaya, sobrino de la mandataria e hijo de Carlos.
Honduras, uno de los países más violentos de América Latina, sufre también el terror de las pandillas Barrio 18 y Mara Salvatrucha. Desde diciembre de 2022, el gobierno de Castro mantiene un estado de excepción similar al que impuso el mandatario Nayib Bukelepara reducir a mínimos históricos los homicidios en El Salvador, una estrategia criticada por defensores de los derechos humanos porque suspende derechos constitucionales.
La mayoría de los municipios de Honduras operan ahora bajo esa orden de emergencia y el ejército ha vuelto a desempeñar un papel central, pese a la promesa contraria que la mandataria hizo en campaña. El año pasado, Honduras registró su tasa de homicidios más baja en 30 años, de 26 cada 100.000 habitantes. De todas formas, analistas advierten que la caída se dio principalmente en la capital, Tegucigalpa, y en San Pedro Sula, y que el crimen organizado se ha ido desplazando a las zonas rurales.
En tanto, el índice de pobreza, que era el más alto en 20 años cuando asumió Castro, por el impacto de la pandemia y dos huracanes, bajó unos diez puntos hasta el 60%, que de todas formas es uno de los más altos de la región. Su sucesor recibirá una economía de crecimiento moderado, con una inflación cercana al 5%, fuerte dependencia de remesas e inversión extranjera y una deuda pública que supera los 18.000 millones de dólares, en un país que cuenta además con escaso empleo formal.
